- El PRI saldrá de palacio…
- Con una gran alianza
- Electoral de la oposición
Luis Velázquez
1
Está claro que existe hartazgo social en Veracruz, sin ningún líder que de norte a sur y de este a oeste inflame la esperanza.
Está claro que el PRI es el partido en el poder y tiene un elevado voto duro para amarrar la elección de gobernador.
Pero, además, todo el dinero del mundo para comprar el sufragio al precio que sea con tal de ganar los comicios el año entrante y evitar que el señor Javier Duarte sea el Ernesto Zedillo que entregó el poder a la oposición.
Por eso, la única posibilidad que el politólogo Carlos Ronzón Verónica mira que la oposición entre a palacio de gobierno el año entrante es con una oposición fuerte.
Por ejemplo, la alianza electoral de los líderes sociales y políticas, entre otros, los siguientes:
Dante Delgado Rannauro, del Movimiento Ciudadano.
El PRD, con Rogelio Franco Castán y el resto de tribus y hordas en un solo haz de voluntades.
El PAN, de Pepe Mancha, con todos los azules aglutinados alrededor de un eje central, con y sin Miguel Ángel Yunes Linares de candidato, que muchas reservas tienen otros partidos políticos de izquierda.
MORENA, de Andrés López Obrador, con las Rocío Nahles y los Cuitláhuac García.
Y el Movimiento de los Encabronados de Elías Miguel Moreno Brizuela, el ex perredista de San Andrés Tuxtla que se fue con López Obrador y luego con Marcelo Ebrard Casaubón, con su fiel escudero, Enrique Aquino.
Sólo así, y de entrada, la oposición significaría una gran esperanza para derrotar al PRI y su candidato en las urnas en la elección de gobernador.
2
Según Ronzón, se necesita hacha, calabaza y miel.
Y si se diera la posibilidad de un real frente amplio opositor, entonces se requerirá una gran voluntad democrática para que el candidato sea el mejor posicionado en el ánimo colectivo a partir del anuncio del frente.
Y sea quien sea, que todos los partidos y asociaciones políticas aglutinados alrededor lo aceptaran, sin celos ni recelos, intrigas ni complots.
De lo contrario, si como por ahora aconteciera con el PAN, PRD y Movimiento Ciudadano de las pláticas que caminaban, de pronto se atoraron cuando el panismo expuso en la mesa que el candidato sería Yunes Linares y tronaron.
3
Coaligado el frente, el siguiente paso sería el recurso económico para la campaña.
En la lógica de Dante Delgado, por ejemplo, una jornada electoral de gobernador significa un gasto de dos mil millones de pesos.
Mil millones por arriba de la mesa con factura y mil millones por las cañerías para los entretelones del poder político, social y mediático.
Giovanni Sartori lo dice con claridad: el partido y el candidato que tienen el dinero tienen más posibilidad de ganar en las urnas.
Por ejemplo, nadie duda que el año entrante el PRI comprará el sufragio al precio que sea con tal de ganar con su candidato.
Y más porque se trata de garantizar la tranquilidad del equipo duartista, pues ellos mismos están ciertos que si la oposición entra a palacio dos años serán suficientes para abrir una auditoría rigurosa desde el gobernador hasta el gabinete legal, los actuales y los anteriores, tipo Claudia Pavlovich en Sonora a Memo Padrés.
Por eso el PRI se empeñará en ganar los comicios al precio que sea, lo que cueste, vaya.
4
El PRI tiene alianzas tradicionales.
Irá con el PVEM, el PANAL, el AVE del biólogo Alfredo Tress y el PES, Encuentro Social del camaleón Gonzalo Guízar Valladares.
Tiene sus candidatos independientes en Gerardo Buganza y Renato Tronco que sólo servirían para restar votos a los candidatos opositores.
En tanto, si el PAN solo registra a su elegido.
Y el PRD también.
Y el Movimiento Ciudadano.
Y MORENA.
Y los Encabronados de Brizuela, de igual manera…todos están condenados al fracaso.
Incluso, en unos casos harán el ridículo.
El partido político a vencer es el PRI, en ningún momento los otros.
Aunque en los otros anida el populismo mesiánico.
Cada aspirante se mira el centro del universo.
Nadie a la altura del ingeniero Heberto Castillo cuando en 1988 declinó su candidatura presidencial ya en campaña por Cuauhtémoc Cárdenas Solórzano que iba, sí, por un Frente Amplio Opositor, el mismito nombre que ahora pretenden endilgar en Veracruz.
5
Y es que para alcanzar la estatura de Heberto Castillo está en esperanto.
Ante todo, se necesita madurez espiritual, madurez cívica, madurez democrática, pues eso de cortarse las venas sin hechos y resultados equivale a conspirar en el café frente a un lecherito y una canilla.
6
Se insiste: las circunstancias de inconformidad social están dadas en Veracruz.
Pero ningún líder a la altura de uno de los estados más grandes del país, el segundo, el tercero y más grande que varias naciones de América Central.
Por ningún lado hay un dirigente que aglutine la irascibilidad popular, el desencanto y la frustración.
Acaso, quizá, pudiera lograrse cuando un frente amplio opositor conjugue a todos en el mismo objetivo, sin pelearse ni desgastarse en la egolatría política.
De lo contrario, otro priista heredará el trono imperial y faraónico del palacio.