Biol. Rosamond Coates

Estación de Biología Tropical Los Tuxtlas

Instituto de Biología, UNAM

Hoy vamos a platicar sobre la sustentabilidad en relación de la crisis socioambiental global que vivimos actualmente, comentando sobre cuáles son sus principales causas y qué tan grande es este problema. En este contexto, es importante entender por qué el concepto de sustentabilidad, que emerge como respuesta a esta problemática, es tan importante en nuestros tiempos. En las últimas décadas, nuestro planeta ha cambiado muy rápidamente. La producción y consumo de todo tipo de cosas han aumentado en una manera acelerado. Algunos ejemplos son que actualmente se produce 20 veces más plástico de lo que se producía 50 años antes. El promedio de consumo de energía eléctrica, por ejemplo, por persona, es casi 3 veces mayor que hace 50 años. En las últimas 4 décadas, la producción de comida se ha triplicado. Además de que el consumo ha aumentado, los ecosistemas naturales también han sufrido cambios negativos. Los ecosistemas naturales han sido eliminados del 40 por ciento de la superficie terrestre, lo que significa que ya desaparecieron el 30 por ciento de bosques y selvas, 50 por ciento de sabanas y pastizales naturales, y 15 por ciento de desiertos y tundras. La pérdida de estos ecosistemas tiene impactos en la biodiversidad, pero no solo ahí, los ecosistemas son la base de la subsistencia de todas las sociedades humanas, por lo que los cambios en ellos tienen consecuencias numerosas y complejas en las sociedades, pero también en sus sistemas económicos. Es por eso que actualmente nos encontramos en una crisis social y ambiental global, es decir, una crisis socioambiental. ¿Qué nos ha traído hasta este punto? Existen varios factores que, en conjunto, explican el origen de esta crisis; uno de ellos es el crecimiento poblacional. Los seres humanos habitamos en, prácticamente, todos los rincones del planeta, gracias a la gran capacidad que tenemos como especie de adaptarnos a diversas condiciones. Sumado a eso, la esperanza de vida promedio en el mundo ha aumentado gracias a diversos desarrollos tecnológicos, relacionado con el aumento en la disponibilidad de alimentos, mejoras en las condiciones de higiene y el avance de la medicina; es decir, sobrevivimos más personas y vivimos por más tiempo. Esto ha ocasionado que cada vez seamos más personas en el planeta. Para 1820, en el mundo había 1.000 millones de habitantes. Actualmente somos más de 7.000 millones de humanos. Mientras más se incrementa la población, más aumenta la demanda de recursos naturales; es decir, de todos los elementos de la naturaleza que requerimos para cubrir nuestras necesidades básicas, o satisfacer nuestras demandas de consumo. Mientras más demanda hay por estos recursos naturales, más presión se ejerce sobre el medioambiente. Por ejemplo, cada vez transformamos más áreas con ecosistemas naturales en tierras para la producción agrícola, y cada día se requiere más agua para uso humano. Además de tener impactos en los ecosistemas, estos cambios también repercuten en las sociedades, pues generan conflictos, por el acceso a los recursos naturales, entre otros problemas.  Como resultado de todo esto, estamos consumiendo enormes cantidades de recursos naturales a una velocidad mayor de la que los ecosistemas pueden reponerlos. Si continuamos con esta tendencia, se espera que, en el año 2050, con una población mundial de alrededor de 9.600 millones de personas, requeriremos el equivalente a tres planetas para contar con los recursos naturales, para mantener los patrones de producción y el estilo de vida actual de nuestra sociedad, lo cual claramente es imposible. ¡DEBEMOS EMPEZAR A CUIDAR LO QUE TENEMOS AHORA!