Kamala Harris, vicepresidenta de Estados Unidos, anunció que planea viajar “pronto” a México, Guatemala y posiblemente a otros países de Centroamérica para hablar sobre cómo “hacer frente a las causas de raíz” que generan la inmigración irregular hacia territorio estadounidense, en tanto que el Presidente Andrés Manuel López Obrador apremió a congresistas de aquel país a aprobar el plan Biden por 4 mil millones de dólares con destino a Centroamérica.

La funcionaria, a la que el presidente Joe Biden ha encargado la misión de coordinarse con los países de Centroamérica para intentar frenar la llegada masiva de indocumentados a la frontera sur de Estados Unidos, hizo el anuncio durante un encuentro con expertos en la región.

“Haré pronto mi primer viaje al Triángulo Norte, parando en México y después visitando Guatemala”, dijo Harris.

La vicepresidenta destacó especialmente sus ganas de visitar Guatemala “lo más pronto posible, dadas todas las restricciones relacionadas con el Covid-19”.

No precisó si también viajará a los otros 2 países que forman el Triángulo Norte, Honduras y El Salvador, cuyos ciudadanos, junto a los de Guatemala, suponen la mayoría de los que llegan sin documentos a la frontera entre México y EU.

Harris, descartó que planee visitar por ahora la frontera con México, porque ese es trabajo del secretario de Seguridad Nacional, Alejandro Mayorkas; mientras que ella tiene una misión “diplomática” centrada en negociar para “hacer frente a las causas de raíz” de la inmigración irregular.

Añadió que EU tiene la oportunidad de proporcionar a los centroamericanos “algún tipo de esperanza de que, si se quedan en casa, la ayuda está en camino”, pese a los altos niveles de violencia y pobreza en el Triángulo Norte.

Desde que Biden le encargó el tema migratorio a finales de marzo, Harris ha conversado por teléfono con los presidentes de Guatemala, Alejandro Giammattei, y de México, Andrés Manuel López Obrador.

El Presidente Obrador hizo un “llamado respetuoso” al Congreso de Estados Unidos para que aprueben la iniciativas de su homólogo Joe Biden que buscan contribuir a frenar el fenómeno migratorio desde Centroamérica.

En la Mañanera desde Palacio Nacional, insistió en que es necesario que se liberen los 4 mil millones de dólares propuestos por Biden, pero además de estos recursos se deben entregar visas de trabajo para Estados Unidos y Canadá, haciendo un análisis previo de cuánta fuerza de trabajo requieren esos países.

“Aprovecho para hacer un llamado respetuoso al Congreso de Estados Unidos, para que resuelvan pronto las iniciativas que ha presentado el presidente Biden. Claro que ellos van a resolver de acuerdo con lo que consideren, nosotros no debemos inmiscuirnos en esos asuntos, pero sí en esta crisis hacerles un exhorto respetuoso a que lo hagan rápido, pronto”.

“El presidente Biden está pidiendo 4 mil millones de dólares y lo tienen que aprobar en el Congreso, entonces ojalá y se apuren, porque hay que atender las causas, no se puede resolver el problema con medidas coercitivas, la gente no sale de sus pueblos por gusto, lo hace por necesidad”, dijo.

AMLO remarcó que también se debe apresurar el compromiso que hizo la actual administración de regularizar a más de 11 millones de migrantes que viven desde hace años en Estados Unidos.

Insistió en que hay una buena relación con Biden a pesar de los comentarios y especulaciones que hizo la oposición. Por ello, mencionó que el trabajo en conjunto ayudará a evitar la migración y el tráfico de menores.

“Estamos trabajando con ellos, es buena la relación y se están llegando a acuerdos. Se pensó que con la llegada del presidente Biden se iban a abrir las puertas a todos los migrantes, esa fue la lectura de algunos y sobre todo se aprovecharon los traficantes de migrantes”.

“A esto agregaron algo que es muy doloroso, que es el uso de niños, si un migrante va acompañado de un niño tiene más posibilidades de obtener la residencia. Hay una situación grave de utilización de niñas y niños”, destacó.

Atribuyó a la desinformación y al crimen el aumento en la migración irregular, pues aprovecharon la llegada de Biden para dar falsas esperanzas a los centroamericanos que buscan llegar a Estados Unidos.

El presidente mexicano informó que la próxima semana se reunirá con los gobernadores de Chiapas, Tabasco y Campeche para afinar la estrategia contra la migración irregular y el tráfico infantil de Centroamérica rumbo a Estados Unidos.

En la conferencia matutina desde Palacio Nacional, detalló que por decisión del Gobierno mexicano se decidió reforzar la vigilancia en la frontera sur para cuidar a los niños que están siendo víctimas de los traficantes.

“Anoche me informó la directora del DIF que se fue a trabajar a Tapachula, Chiapas, ya no va a estar en Ciudad de México, va a estar allá hasta que pase la crisis”, expresó.

El Presidente comentó que como se trata de menores de edad es responsabilidad de su administración impedir que haya un flujo desordenado y peligroso de los migrantes.