Ciudad de México.-Presentado la semana pasada por la Secretaría de Hacienda y Crédito Público, el proyecto de Criterios Económicos para la elaboración del Presupuesto del próximo año pegará directamente a los mexicanos más pobres, debido a que contempla recortes por 311 mil 800 millones de pesos: 136 mil 700 millones al cierre del presente año y 175 mil 100 millones para el próximo.
En el ramo de la salud la afectación se observará claramente, con una reducción del 30 por ciento de su presupuesto, en el programa Seguro Médico Siglo XXI, que otorga acceso a la salud a todos los niños entre 0 y 5 años que no son derechohabientes de seguridad social, mientras que los programas de vacunación, vigilancia epidemiológica, salud sexual y reproductiva y prevención de sobrepeso y obesidad sufrirán un recorte de mil 200 millones de pesos.
En ese sentido la jefa de Políticas Públicas de UNICEF, Erika Strand, comentó que “es preocupante el recorte a los programas que no sólo atienden a los niños, sino a los más pobres y en situación más vulnerable”.
Según la UNICEF, el presupuesto para infancia se reduce en 14.6 por ciento, lo que representa una disminución de 4 mil 725 millones de pesos en programas de salud y educación.
Marcelo Delajara, director de Crecimiento Económico y Mercado Laboral del Centro de Estudios Espinosa Yglesias (CEEY), señaló que “esos programas de salud pública le pegan a la población más pobre; son a quienes más les afecta el zika, la epidemia de obesidad y el problema del embarazo adolescente”.
Por su parte, el CEEY también cuestionó la disminución a recursos para pequeños productores agropecuarios, los cuales mejoraban la competencia y permitían precios más bajos en los productos.
“Cuando el precio del trigo o del maíz disminuye, nunca vemos que el precio de la tortilla disminuya, siempre se mantiene o aumenta. Las empresas productoras a gran escala compran el trigo o maíz muy barato, pero siguen vendiendo caro. La idea de los programas reducidos era mejorar la competencia en esos mercados asimétricos. Sin ellos, le pegas indirectamente a los más pobres, que más consumen tortilla”, señaló Delajara.