lunes, mayo 13, 2024

Escenarios 

•Héctor Yunes, el bravucón 

•Obligada denuncia contra Duarte…

•Solo así ganaría en las urnas 

Por: Luis Velázquez

1

El precandidato rojo a la mini/gubernatura sigue cometiendo pifias.

Por ejemplo, en Xalapa, el viernes 19 de febrero, «lanzó, reza el boletín, un fuerte y rotundo llamado a las autoridades competentes, específicamente a la Federación, para que se pase de la auditoría al castigo de quienes han lastimado a Veracruz»

Ok.

La Auditoría Superior de la Federación, por ejemplo, ya cumplió su parte, interponiendo una denuncia penal contra 19 duartistas por irregularidades en el destino de los fondos federales en el año anterior.

Ahora, una vez más, y de nuevo, Juan Manuel Portal, titular de la Auditoría Superior de la Federación, dice al reportero Carlos Loret de Mola, que la nueva denuncia está en proceso «y es cosa de la Procuraduría y de la agencia del Ministerio Público Federal».

También le dice que en la cuenta pública del año 2014 Veracruz, con Javier Duarte, JD, es el peor calificado en el manejo del erario federal.

Más aún, revela lo siguiente:

«En diversas ocasiones he hablado con el gobernador y nunca ha cumplido lo que se ha ofrecido».

Y ante la temeridad con que actúa JD, dice el Auditor, «le he solicitado en un par de ocasiones que veamos entonces en qué se gastó todo ese dinero. Pero no hay respuesta».

Por eso, cuando el precandidato priista a la mini llama, dice él, a la Federación, para pasar «de la auditoría al castigo», la está pifiando, porque en todo caso, como inminente candidato del PRI a la gubernatura de dos años y como ciudadano Héctor Yunes Landa está obligado a interponer una denuncia penal, igual que la rectora de la Universidad Veracruzana, Sara Ladrón de Guevara, para que la ley se aplique.

Así, con el simple hecho de que el precandidato diga que convoca al gobierno del presidente Enrique Peña Nieto para dar el siguiente caso, nada se gana.

Tampoco ninguna expectativa levanta en la población electoral con esa bravuconería.

Yunes Landa ha de actuar si en verdad opera con honestidad y desea ganar en las urnas.

Y/o en todo caso, su gente, entre ellos, y por ejemplo, el diputado local, Ricardo Ahued Bardahuil, ex diputado federal y ex presidente municipal de Xalapa, que conoce el trámite jurídico correspondiente y el cabildeo político necesario.

De lo contrario, su convocatoria queda en simple balandronada. El gritito del pastor anunciando que ahí viene el lobo. El niño malcriado que «tira la piedra y esconde (una vez más) la mano.

2

Un hecho queda claro: JD perdió la prerrogativa no escrita de elegir al candidato sucesor.

Incluso, jugó su carta visible y su «tapado» y ni así le funcionó.

Los senadores priistas, Pepe Yunes Zorrilla y Héctor Yunes Landa se impusieron en la encuesta y también en el ánimo de Los Pinos.

Pepe declinó por Héctor.

Pero como a JD se le fue la prerrogativa futurista y perdió, y por añadidura descarriló el Maximato del góber fogoso, entonces, y en la lógica del politólogo Carlos Ronzón Verónica, está haciendo todo para empinar al precandidato rojo en las urnas y facilitar su derrota.

Por ejemplo:

La «tomadura de pelo» a la rectora de la Universidad Veracruzana con el pago de los más de dos mil millones de pesos solo dejará como resultado que la comunidad académica vote en contra del PRI en la elección de mediados de año dada la tibieza con que Héctor Yunes ha actuado ante el rafagueo duartista a la UV.

Por ejemplo:

La iniciativa de ley en la 63a. Legislatura para que la UV, como los otros patrones oficiales en Veracruz (organismos descentralizados y presidentes municipales, entre otros) paguen las cuotas obrero/patronales en forma directa al Instituto de Pensiones, IPE, de igual manera generará el repudio electoral en contra del partido tricolor.

 Y más porque la percepción ciudadana es que el IPE ha sido utilizado como una «caja chica» del gobernador y que por añadidura ha sido saqueado.

Por ejemplo:

Seguir cabildeando la ley anti-aborto para que sea aprobada por el Congreso en una segunda ronda como lo establece la ley ha sembrado la irascibilidad social de la mayoría femenina que reclama su legítimo derecho a disponer de su cuerpo.

Por ejemplo:

Seguir reteniendo las participaciones federales a los alcaldes solo siembra el escozor entre los ediles.

Y más porque la rasuradora duartista aplica por igual a los alcaldes de la oposición que del PRI.

Y más de los priistas, pues están obligados, digamos, y en nombre de la mal llamada institucionalidad, a guardar silencio.

Por eso, observa el maestro en Ciencias Políticas de la Universidad Complutense, mientras JD siga cometiendo pifias y demasiados agravios en contra de la población como si estuviera en el primer año del sexenio y Yunes Landa se lo permita, sin asestar un manotazo (hablando con Manlio Fabio Beltrones para su intervención) y establecer un tope a tales desmanes, el camino al Gólgota electoral será más turbulento y revuelto.

Incluso, nada fácil sería que el precandidato priista tan dado a las encuestas con que anduvo en los tiempos de aspirante ahora las esté omitiendo porque el resultado le sea desfavorable.

Y desfavorable por culpa de Javier Duarte.

Y aún así se refocila tirando la toalla a la Federación para que ella ponga un alto.

Claro, pero siempre y cuando exista una denuncia penal de Yunes Landa en contra de JD y/o de los duartistas responsables del área polvorienta y explosiva.

Dice Ronzón:

«Cae Duarte o, mínimo, Arturo Bermúdez Zurita y/o Luis Ángel Bravo Contreras».

Tal cual es el único para que el candidato rojo gane n las urnas, pues eso de comprar con billete la elección constituye un riesgo como fue el caso de Carolina Gudiño Corro, Ana Guadalupe Ingram y Elizabeth Morales derrotadas en la elección de diputadas federales.

4

Claro, como dice el aspirante rojo, «estamos hartos de que el dinero destinado para obras y servicios se vaya a los bolsillos de unos cuantos».

Claro que debe existir «castigo para quién o quiénes robaron» el erario, «sea quien sea», si es que Yunes Landa se refirió así a Javier Duarte.

Claro que la ley ha de aplicarse «a secas, pareja, para evitar que se «fuguen los saqueadores del erario y se vayan a gozar de las mieles de lo hurtado a otro país», tal cual como, incluso, se ha pregonado de JD en el pasillo.

Pero para evitar todo eso, la única posibilidad es fortalecer el discurso y la perorata con hechos.

Y los hechos significan una denuncia penal de Héctor Yunes en contra de JD y los duartistas bajo sospecha de enriquecimiento ilícito.

De lo contrario, las simples cacayacas nada garantizan el triunfo en las urnas.

Y el olvido, más que el perdón, más que la impunidad, de nuevo reinará de igual manera como predominó de la sucesión de Fidel Herrera a Javier Duarte, en que ningún fidelista, ni el góber fogoso, fueron enjuiciados.

Lo peor del asunto es que el resto de los precandidatos a la mini también bombardean a tiro por viaje a JD.

Pero ninguno ha dado el paso siguiente con una denuncia penal concreta y específica por (presunta) corrupción.

Más bragada ha salido la rectora Sara Ladrón de Guevara,

Y más porque si Patricio Chirinos Calero procedió en contra de Dante Delgado Rannauro, Porfirio Serrano Amador y Gerardo Poo Ulibarri fue por órdenes del presidente Ernesto Zedillo.

Más aún: si los precandidatos a la mini (Juan Bueno Torio, Cuitláhuac García, Armando Méndez, Elías Miguel Moreno Brizuela, Héctor Yunes Landa y Miguel Ángel Yunes Linares) se están tirando a la yugular de la corrupción duartista, entonces, si entre todos suscribieran una denuncia penal en la Procuraduría General de la República en contra de Duarte… otro gallo cantaría al destino de los 8 millones de habitantes de  Veracruz.

Publicidad




Otras noticias

Bitácora Política

Bitácora Política

Bitácora Política

SENTIDO COMÚN