Xalapa, Ver. –El poner al descubierto la existencia de 70 mil pruebas de VIH-SIDA apócrifas, así como el hallazgo de toneladas de medicamentos clonados, que habrían sido administrados en pacientes con cáncer de Veracruz, ha puesto en jaque a la Secretaria de Salud de Veracruz y a la Comisión Federal para la Prevención de Riesgos Sanitarios (Cofepris).

El pasado 17 de enero de 2017, Miguel Ángel Yunes Linares dio a conocer que durante los gobiernos de Fidel Herrera y Javier Duarte se suministró medicamento clonado a enfermos con cáncer. Las compras se realizaron, dijo, entre 2010 y 2013 a tres empresas vinculadas al Diputado Federal Jorge Carvallo Delfín.

El hecho puso bajo evidencia a los ex mandatarios priistas. Incluso, Fidel Herrera Beltrán, firmó su renuncia en el Consulado de Barcelona, España, el 22 de enero del año corriente y una semana después, solicitó un amparo contra alguna orden de aprehensión, presentación o retención que pudiera ser girada en su contra.

Los señalamientos del Ejecutivo Estatal pusieron bajo sospecha a los ex mandatarios veracruzanos. Pero a la vez alcanzó a la Cofepris, una dependencia del Gobierno Federal encargada de prevenir y atender los riesgos sanitarios, contribuyendo así a la salud de la población.

Yunes Linares aseguró que la Cofepris tuvo conocimiento de la adquisición de medicamentos falsos desde el año de 2012 y no se pronunció al respecto.

Sin embargo, los efectos de tales aseveraciones, ante los medios de comunicación, provocó que la Cofepris emitiera una alerta sanitaria el primero de febrero de 2017; y ahora, activistas y comunidades LGTB exigen al Secretario de Salud en Veracruz, Arturo Irán Suárez Villa, que los pacientes a quienes suministraron medicamentos clonados y pruebas falsas de VIH sean localizados a la brevedad.

“Cofepris, concentrada en todo, menos en la Alerta Sanitaria”

A 76 días de señalamientos públicos entre Servidores Estatales y Federales, Patricia Ponce Jiménez, integrante del Grupo Multisectorial en VIH – SIDA del Estado de Veracruz, advierte que lo único cierto es la pérdida de 14 años de activismo en temas de salubridad. Dijo, producto de la desconfianza que hoy existe en las personas para ingerir medicamentos que provengan del estado de Veracruz.

La también investigadora por la Universidad Veracruzana (UV), reprobó que José Narro y la Cofepris, digan que han solicitado al Gobierno de Veracruz información sobre 23 mil 016 pruebas de VIH – SIDA sin registro sanitario, cuando, dijo, “el problema antecede desde 2013”.

La académica de la Universidad Veracruzana (UV), advirtió que, de ser cierto, y las pruebas de VIH fueron administradas a mujeres embarazadas, el riesgo podría ser mayúsculo al día de hoy, pues de acuerdo con estadísticas de la Organización Mundial de la Salud (OMS), en casos positivos de VIH, el virus es transmitido, en promedio, a al menos otras cinco personas.

“Si una mujer, hace tres años, le dijeron no tienes VIH, y no tomó medicamento a lo largo de su embarazo; parió vía natural; no le hicieron cesaría y amamantó, es muy probable que ese niño o niña esté muerto, porque el virus acaba muy rápido con los bebés” recriminó.

Ante el panorama expuesto, el Grupo Multisectorial solicitó a la brevedad la intervención de la Comisión Nacional de los Derechos Humanos (CNDH), pues dijo, no solo está en juego el castigo de los responsables, sino la salud y la vida de personas.

“Si Gobierno de Yunes Linares tiene pruebas, que las presente”

Por otra parte, la vocera del Grupo Multisectorial, exigió a la Secretaría de Salud de Veracruz que aporte evidencias sustentadas sobre el destino de las 23 mil 016 pruebas, aseguran que el titular de la dependencia, en 67 días de la nueva administración no se pronunciado al respecto.