Ciudad de México.- La reciente discusión de las Cámaras sobre las leyes del Sistema Nacional Anticorrupción ha dejado ver a un PRI temeroso y distante. “Quisiéramos que salgan las siete, nada más que no hay predictámenes ni dictámenes todavía sobre dos o tres de ellas. Queremos que salga un buen producto y que no nos vayamos a arrepentir de hacer algo con prisas”, justificó el coordinador del PRI, Emilio Gamboa
A los legisladores les importó poco que entre esas iniciativas se encontrará la denominada Ley 3de3, solicitud planteada por miles de ciudadanos, a quienes ellos dicen representar.
De acuerdo con las personas que recabaron firmas la iniciativa consta de 5 aspectos fundamentales: “El primero es obligar a los funcionarios de alto nivel a presentar sus declaraciones patrimoniales, fiscales y de intereses. El segundo punto es tipificar los actos de corrupción, que de acuerdo a la iniciativa son 10. El tercero es determinar conflictos de intereses. El cuarto aspecto buscará que existan acciones penales dirigidas tanto a empresarios como a políticos que incurran en actos de corrupción. Y el quinto es perseguir las redes de corrupción y no sólo a una persona, detalló el organizador”.
Por el lado de los representantes panistas y perredistas se exigió una reforma integral y condicionaron su voto a que el paquete incluya siete ordenamientos para castigar la corrupción con sanciones administrativas y penales.
“Son siete y no sólo una parcialidad porque dejaría incompleto el Sistema”, advirtió el coordinador albiazul, Fernando Herrera.
“El PRI quiere poco o nada. Nosotros queremos todo o nada”, soltó Miguel Barbosa, coordinador del sol azteca.
Cabe recordar que el 21 de marzo de este año el priista Emilio Gamboa dijo “Me parece que se va a convertir esto en una cacería de brujas, si mañana llegas tú con un carro nuevo: a ver, investíguenla, ¿con qué lo compró, qué dinero utilizó, qué cheque dio, qué depositó? Me parece que hay cosas que van a lastimar a la sociedad mexicana”.