Xalapa, Ver.-En medio de las críticas de las representaciones del Partido Acción Nacional (PAN), Partido de la Revolución Democrática (PRD), Partido Movimiento Ciudadano (MC), Partido Movimiento Regeneración Nacional (Morena) y Partido Encuentro Social (PES), el Consejo General del Organismo Público Local a Electoral (OPLE), por unanimidad de votos, designó a Héctor Roa Morales como nuevo secretario ejecutivo.
Y es que a lo largo de las tres horas de discusión del acuerdo, los representantes de las organizaciones políticas inconformes insistieron que este ciudadano, que ya desempeñó el cargo de 2009 a 2012 en el Instituto Electoral Veracruzano (IEV), no reúne los requisitos contenido en los lineamientos del Instituto Nacional Electoral (INE), pues fue sometido a una amonestación pública por parte del Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación (TEPJF).
Además denunciaron su relación con la administración estatal, a la que fue invitado a colaborar cuando salió del extinto ente comicial y su ineficiencia para actuar penalmente en 2010, cuando se suscitó el escándalo de las cámaras en los baños de mujeres.
El consejero presidente del OPLE, José Alejandro Bonilla Bonilla, defendió su propuesta y dijo que se apega a lo establecido por el órgano electoral nacional, incluso mencionó que va más allá, porque en la reglamentación interna se le obligó a proponer por lo menos a una mujer, para respetar el principio de paridad, plateando los nombre de dos mujeres y dos hombres.
En sus palabras justificó los 30 años de servicio y experiencia electoral que tiene Roa Morales, por lo que minimizó la sanción que se le impuso en 2009 diciendo que es “leve” frente al trabajo que ha desarrollado en toda su vida profesional.
Desde ya, los representantes del PAN, Lauro Hugo López Zumaya y del PRD, Luis Kafir Palma Ramírez, anunciaron que van a impugnar el nombramiento, aludiendo que el Consejo General no evaluó exhaustivamente el perfil del ahora secretario ejecutivo ni los antecedentes que lo catalogan, a sus juicios, como una persona no apta para desempeñar este encargo.