Al cierre del primer semestre del año, el gobierno federal destinó 18 mil 983.4 millones de pesos para el pago de los intereses de la deuda interna de Petróleos Mexicanos (Pemex) y de la Comisión Federal de Electricidad (CFE), cifra 11.9 por ciento superior en términos nominales –sin descontar la inflación– si se compara con los 16 mil 950.9 millones de pesos destinados en el mismo periodo del año pasado, demuestran cifras oficiales.
De acuerdo con los últimos reportes emitidos por la Secretaría de Hacienda y Crédito Público (SHCP), la administración pública destinó 3 mil 553.2 millones de dólares al pago de los intereses de la deuda externa de las empresas productivas del Estado, cantidad que es 12.1 por ciento más alta respecto a los 3 mil 168.3 millones de dólares que fueron pagados entre enero y junio del año pasado.
Si la cifra más reciente del pago de intereses de la deuda interna de ambas firmas se compara con lo reportado al cierre del primer semestre de 2019 –que sumó 15 mil 800.7 millones de pesos– en el arranque del gobierno del presidente Andrés Manuel López Obrador, existe un incremento de 20 por ciento.
Respecto a los 2 mil 679.7 millones de dólares de intereses que fueron liquidados entre enero y junio de 2019 para el pago de la deuda externa de las empresas productivas del Estado, la cantidad más reciente es 32.5 por ciento más alta.
El miércoles, Morena y sus aliados aprobaron en comisiones cambios a los artículos 27 y 28 de la Constitución para devolver a Pemex y la CFE el carácter de empresas públicas del Estado mexicano, un movimiento que causa debate entre analistas del sector financiero.
“Da la idea de que con este movimiento el gobierno tendría que asumir los pagos de la deuda de la petrolera… Ambas empresas gozarán de los beneficios de los que goza la deuda del gobierno, pero no implica que los recursos sean ilimitados”, sostuvo en entrevista Gabriela Siller, economista en jefe de Banco Base.
La analista explicó que aunque de forma estricta no se pueden comparar emisiones hechas entre Pemex y el gobierno si no son en la misma fecha, las últimas colocaciones de ambos actores tienen un diferencial de tasas de aproximadamente tres puntos porcentuales.
El cambio que fue aprobado en comisiones podría implicar que Pemex y CFE puedan salir a los mercados a financiarse al mismo costo al que lo que lo hace el gobierno y que el pago de los intereses de la deuda sea el mismo. Actualmente la petrolera no tiene grado de inversión ante las agencias calificadoras de valores, lo que implica que sus costos son más elevados respecto a los del Estado.
“Los bonos de Pemex y CFE pagan tasas de interés más altas que las del gobierno federal, si se da esta garantía de forma explícita la diferencia se cerraría, pero no necesariamente se reducirá el costo financiero del gobierno, porque esto provocaría que las tasas que pagan el gobierno y CFE suban, se tendrían que acercar a las de Pemex en los mercados, podría haber riesgos”, añadió James Salazar, subdirector de análisis de CIBanco.
El último reporte trimestral de Pemex indica que 72 por ciento de su deuda está colocada en dólares estadunidenses, 17 por ciento en pesos mexicanos y el restante se divide entre euros, yenes y otras divisas.