México.- La recaptura al estilo de Hollywood de Joaquín «El Chapo» Guzmán, dio otro giro el domingo luego de que se conociera que las autoridades mexicanas buscan interrogar al actor estadounidense Sean Penn sobre su entrevista clandestina con el capo mexicano.
Una fuente del Gobierno Federal dijo a la AFP que la Fiscalía quiere hablar con Penn y la actriz mexicana Kate del Castillo sobre su encuentro con Guzmán en octubre, tres meses antes de su recaptura.
«La información es correcta, claro, es para deslindar responsabilidades», dijo la fuente bajo anonimato, después de que la revista Rolling Stone publicara el sábado en su sitio web la entrevista concedida al actor por «El Chapo» en octubre pasado, gracias a la ayuda de Kate del Castillo.
Una segunda fuente del Gobierno Federal dijo a la AFP que no estaba claro si los actores habrían cometido un delito. Un reportero puede entrevistar a un presunto narcotraficante, pero «ellos no son periodistas», añadió. La fuente dijo además a la AFP que esos encuentros ayudaron a las autoridades a dar con el paradero del narcotraficante de 58 años, que fue arrestado el viernes en la costeña ciudad de Los Mochis, de su natal Sinaloa (noroeste), en una incursión militar.
La fiscal general, Arely Gómez, reveló el viernes que el capo sostuvo reuniones con actrices y productores de los que no dio nombres, con «la intención» de protagonizar una película sobre su vida, lo que ayudó en parte a descubrir su ubicación. Esos encuentros constituyen «una nueva línea de investigación», expuso Gómez.
Mike Vigil, exdirector de operaciones internacionales de la agencia antidrogas estadounidense DEA, descartó que Penn sea acusado por esa entrevista. «Dudo seriamente que se presenten cargos contra ellos, a pesar de que Sean Penn tomó medidas extraordinarias para que su teléfono no fuera rastreado», comentó a la AFP.
El domingo, el jefe de gabinete de la Casa Blanca, Denis McDonough, afirmó que durante la entrevista con Penn Guzmán se jactó «de las grandes cantidades de heroína que distribuyó por todo el planeta, incluyendo Estados Unidos», lo que «irritó» a la presidencia estadounidense.
«Esto plantea muchas preguntas interesantes sobre él y otros implicados en esta supuesta entrevista. Vamos a ver qué pasa», agregó McDonough en el programa «Estado de la nación» de la cadena televisiva CNN.
Abrazo de compadre, Rolling Stone publicó una fotografía tomada el 2 de octubre que muestra a Penn vistiendo una playera negra y saludando con la mano al bigotudo líder del cartel de Sinaloa, de camisa azul. Penn escribió que el capo le dio un gran abrazo cuando se conocieron en algún sitio selvático, y que obtuvo siete horas de entrevistas presenciales y telefónicas sobre sus actividades delictivas.
«Yo suministro más heroína, metanfetaminas, cocaína y marihuana que cualquiera en el mundo», dijo entre tragos de tequila a Penn en una sorprendente admisión sobre el tamaño de su negocio ilegal.
Rolling Stone también publicó un video que muestra a Guzmán sin bigote, contando que trafica drogas desde antes de los 15 años porque en su pueblo natal, La Tuna, «no había oportunidades de trabajo».
En mensajes de texto que intercambiaron después de la reunión, Guzmán comentó con Penn una incursión militar efectuada el 6 de octubre que casi deriva en su recaptura. El Chapo le restó importancia a las lesiones que sufrió en el rostro y una pierna al evadir ese operativo. «No es como ellos lo dicen, sólo me duele la pierna un poco», dijo Guzmán. Las autoridades dijeron que los marinos no dispararon contra el narcotraficante porque estaba acompañado de dos mujeres y una niña, y que se lastimó él solo en una caída.
La entrevista de Rolling Stone se difundió horas después de que la fiscalía anunció que busca que «El Chapo» sea extraditado a Estados Unidos, un giro de la posición del presidente Enrique Peña Nieto, quien se oponía a enviarlo a cárceles de ese país antes de que se fugará del penal de máxima seguridad El Altiplano, situado a 90 km de la capital mexicana.
La fiscalía mexicana informó el sábado que recibió dos solicitudes de extradición el año pasado por acusaciones de varios delitos graves, incluido narcotráfico y asesinato, por lo que obtuvo órdenes de detención con fines de extradición. «Con la recaptura de Guzmán Loera se deberá dar inicio a los respectivos procedimientos de extradición», indicó la fiscalía en un comunicado en el que no se mencionó una fecha para el arranque de ese proceso que contempla el derecho de «El Chapo» a apelar.
«No debe ser extraditado porque en México hay una Constitución justa», reclamó Juan Pablo Badillo, uno de los abogados del capo, afuera del penal El Altiplano, al que fue reenviado Guzmán.
«El Chapo» fue arrestado después de una incursión militar en una casa de Los Mochis, Sinaloa, que derivó en una balacera con un saldo de cinco presuntos delincuentes muertos y otros seis detenidos. El capo y su jefe de seguridad se escaparon durante la balacera por los pasadizos del drenaje subterráneo, del que salió por una alcantarilla, robaron un automóvil y tomaron una carretera, donde fueron interceptados por los militares.