• Decepciona Buganza
• Le han dado todo
• Por ningún lado levanta
  

Luis Velázquez

PASAMANOS: Las versiones son que el llamado candidato independiente a gobernador de Veracruz, Gerardo Buganza Salmerón, está desencantando al señor Javier Duarte.

Tal cual, y no obstante el apoyo financiero que le ha subvencionado, Buga ha sido incapaz de levantar expectativas en la población electoral.

Por ejemplo, al momento ni siquiera ha podido organizar un mitin con unas 300, 400 personas.

Apenas unos cuantitos que pasan por ahí a la hora del evento y se acercan curiosos, llenos de morbo, el mismo morbo con que ahora el reglamento de Tránsito multa a los conductores que cuando pasan frente a un accidente se detienen, bloqueando la circulación, para mirar la trágica muerte, el cuerpo escurriendo sangre.

Es más, se afirma que el Jefe Máximo del Priismo en Veracruz (así llamaban a Plutarco Elías Calles, Jefe Máximo, con mayúsculas) ha encarado a Bugy (también así le llaman los priistas) porque el productor cañero y ganadero, Juan Carlos Molina Palacios, ha organizado eventos de hasta 20 mil gentes, como ocurriera en Carlos A. Carrillo, en la inauguración de su jornada electoral para la Liga de Comunidades Agrarias, y ahora, el domingo, en el WTC de Boca del Río, donde llegarán otros 20 mil.

En el caso de Buganza, la decepción se amontona, porque fue lanzado solo para arrebatar votos, si es que puede, al panista Miguel Ángel Yunes Linares, inminente candidato del PAN a la gubernatura, cuando menos, pues se ignora si con el Frente Amplio Opositor.

Y, ni hablar, Buganza aprovechó el viaje, soñando con que acaso quitaría sufragios al patriarca de los Yunes azules, y en un descuido, también al candidato priista y queda con la silla embrujada de palacio de Xalapa, que el hermano de Emiliano Zapata, Eufemio, imaginaba como una silla de montar caballos briosos, y que, bueno, quizá por eso mismo suele enloquecer.

BALAUSTRADAS: Bugy, el hombre que venció a la muerte encarnada en el cáncer, inició como candidato independiente con el sello duartista.

Por ejemplo:

El día cuando anunciara su candidatura la efectuó desde el palacio de gobierno anunciando su renuncia, es decir, aprovechando la infraestructura pública.

Tal cual usó, sin pudor, y a tono con la moral cristiana que pregona, la transmisión estatal de TV Más.

Después, las versiones indican que se encerró varias horas con el Jefe Máximo en la Casa Veracruz para revisar la estrategia mediática y publicista y propagandística de su campaña, y ahí mismo depositaron el anticipo a la empresa contratada.

Luego, apareció con su autobús, una réplica del mismo que utilizara en el año 2004 contra Fidel Herrera, anunciando que había llegado el más bronco y bragado de los tiburones… convertido, vaya, en simple charalito.

Ahora le ha dado con tomarse la foto como coleccionista de un álbum infantil, al lado de los políticos independientes, como con Jaime “El bronco” Rodríguez, Cuauhtémoc Cárdenas Solórzano y el perredista Guadalupe Acosta, tratando de asustar con el petate del muerto, cuando ni “El bronco” ni Cárdenas ni Acosta votan en Veracruz.

Y eso de impresionar con las fotos es como cuando Tomás Ruiz González, el quinto secretario de Infraestructura y Obra Pública, publicaba sus fotos al lado de la exitosa actriz Ana de la Reguera.

De ahí pa’lante, Bugy, por aquello de “El aceitoso”, ningún buganzazo ha podido asestar.

Puras llamaradas de petate con sus casitas de campaña que cabildea en pueblos rurales, cuando el eje central de la población electoral se ubica en otras latitudes.

Candidato a gobernador en el año 2004 cuando fue incapaz de defender su victoria en las urnas ante los tribunales, fallido aspirante en el 2010 derrotado por Yunes Linares, a Bugy se le pasó el tiempo.

Veracruz no es igual a Brasil con Luz Inácio Lula de Silva, ni a Francia, con François Mitterand, que ganaran la presidencia de la república hasta la cuarta ocasión.

ESCALERAS: La dupla Fidel Herrera y Javier Duarte lanzaron su operativo para encumbrar a los llamados Chamacos de la fidelidad como posibles candidatos emergentes a la gubernatura, pero les salió fallido.

Fallido con el diputado Juan Cruz Elvira, de Los Tuxtlas, al destapar a Érick Lagos Hernández, ya ungido diputado federal.

Fallido con los diputados David Velasco Chedraui y “El mil usos”, José Ramón Gutiérrez, con Adolfo Motita, entronizado diputado federal.

Fallido que se quedó el diputado Edgar Díaz, de Chicontepec, para lanzar a Alberto Silva Ramos.

Ahora, Bugy está saliendo igual de fallido.

Se ignora si él mismo juego como un comodín apostando al mejor de los mundos.

Se ignora si tendrá barajas ocultas en el traje, digamos, capitalizándose.

Pero de que ahora, y como van las cosas, ha decepciona al Jefe Máximo, ni duda cabe.

Con todo y que en el anuncio de su candidatura, y desde el palacio de gobierno, en el corazón del edifico y a través de TV Más, se fuera con todo en contra de Fidel Herrera y lo llamara un mafioso, once años después, y lo que significa que durante tantos años ha guardado resentimiento al góber fogoso y gozoso.

Es decir, un católico que se confianza y comulga y escucha misa todos los días, lleno de odio.

Quizá el odio con que Jesús de Nazareth lanzara a latigazos a los mercaderes del templo.