Malecón del Paseo

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  • 10 días que estremecieron a Duarte
  • Ningún político salió en su defensa
  • Ni tampoco el PRI ni la CNOP

Luis Velázquez

EMBARCADERO: Diez días después que el multihomicidio de la colonia Narvarte en el Distrito Federal estremeciera las entrañas del gobernador de Veracruz, por fin apareció en público… Ofreció rueda de prensa, hora insólita, a las 7 de la mañana… Pero, además, en medio de otro precedente: los reporteros incómodos e indeseables quedaron fuera, pues tuvieron tache de la vocería para ingresar a la sala… No obstante, el daño a la credibilidad y confianza ciudadana en el duartismo está hecho por tantos días de silencio… Y, por tanto, reza el adagio popular, palo dado ni Dios lo quita…Cierto, ciertísimo, unos seis, siete días después, el secretario General de Gobierno, Flavino Ríos Alvarado, reaccionó en Huastusco, primero, rechazando que el jefe máximo fuera autor intelectual del crimen del fotógrafo Rubén Espinosa y la activista Nadia Vera… Y segundo, afirmando que de los 18 asesinatos de trabajadores de la información, tres habían sido esclarecidos por la Fiscalía General… Tal cual, el góber de la Complutense retomó el discurso de Flavino y lo amplió, asegurando que los crímenes restantes estaban en manos de la Procuraduría General de la República, y como quien dice se lavó las manos, igual que Poncio Pilatos, con agua limpia, jabón, toalla y con una sonrisa… Así, sólo Flavino y el diputado federal, el guardaespaldas de Miguel Alemán Velasco, Alejandro Montano Guzmán, subió a tribuna en el Congreso de la Unión junto al priista David Pinchyna para revirar a la oposición y asegurar que el jefe máximo del priismo jarocho es inocente, incapaz de ordenar el asesinato de los reporteros y fotógrafos y activistas incómodos… De ahí pa’lante, ningún funcionario del gabinete legal y ampliado, ningún diputado local y federal priista, ningún senador priista, ni siquiera, vaya, el CDE del PRI y la CNOP, tiraron su espada en prenda para defender al gobernador en las horas más difíciles del sexenio, pues luego de los 18 asesinatos de trabajadores de la información, y luego de Ayotzinapa, Tlatlaya, la Casa Blanca de “La gaviota”, el narcogobierno de Michoacán, y la fuga de Joaquín “El chapo” Guzmán Loera, nada ha estremecido tanto a la opinión pública local, nacional e internacional como el crimen de Rubén Espinoza, Nadia Vera y las tres chicas…

ROMPEOLAS: Demasiado, excesivo tiempo permaneció en silencio el jefe máximo… Quizá se deba a su naturaleza humana, como un joven político bipolar, temperamental y explosivo, que suele enconcharse ante los problemas y acaso, hasta sumirse en la depresión, y por eso su aislamiento… De igual manera, resulta insólito el silencio del gabinete legal, el poder Legislativo con sus diputados priistas y anexos, conexos y similares, y hasta el silencio del PRI y la CNOP… Algunos dicen que el gabinete se agazapa ante el mundo adverso, porque tienen prohibido involucrarse en las funciones de otros titulares, y por tanto, guardan, digamos, la sana distancia, aun cuando al mismo tiempo dejan la percepción de que allá y el jefe máximo con sus problemitas, mientras ellos se salvan y las estocadas les lleguen lejos… Y es que, además, si miramos hacia el pasado inmediato, en ninguna de las crisis vividas y padecidas por el duartismo en los últimos cuatro años con ocho meses y once días, y que han sido muchas, los secretarios han salido en su defensa, y por el contrario, agachan la cabeza… Todos, pues, actúan como si la virgen les hablara… Y en términos de administración pública, pero también de lealtad, lealtad institucional, vaya, está mal que dejen morir solo al jefe máximo… Desde luego, nadie dudaría que se trata de un caso manifiesto de falta de liderazgo, a diferencia, por ejemplo, de en el fidelato cuando el góber fogoso y gozoso apretaba tuercas cuando alguien soslayaba fidelidad fundamental y se sumía en el silencio, agazapado como un topo, eludiendo la realidad…

ASTILLEROS: En fin, diez días después (los diez días que estremecieron el mundo diría John Reed), el jefe máximo salió a defenderse a sí mismo… Así, le gusta dirigir la orquesta y así juega… En todo caso, se trata de su palabra ante el grito callejero que retumba tanto en Veracruz como en el país y en la prensa extranjera, llegando al caso insólito de que en la vía pública, tanto en Xalapa y el Distrito Federal, por ejemplo, cientos, miles de reporteros, activistas sociales y ciudadanos desfilaron con cartulinas y estandartes con la foto del gobernador y una leyenda cruel y atroz llamándole “asesino”… Claro, hay de por medio un juicio penal que lleva la procuraduría General de Justicia de Miguel Ángel Mancera… Y, por tanto, hasta que el expediente sea concluido podrá emitirse el dictamen de las culpabilidades… Con todo, se trata de la indignación popular frente a la palabra del gobierno de Veracruz en una crisis de credibilidad grave y pesada, y en donde dados los antecedentes, la impunidad ha descarrilado por completo la confianza pública (¿todavía queda un remanente?) en el gobierno de Veracruz… El digno investigador de la UV, Alberto Olvera, así lo ha planteado con hechos en su artículo dominical en la edición latinoamericana de El País, de España…