En la actualidad, es grande la preocupación que existe con respecto al riesgo de ser víctima de estafa mediante WhatsApp. Por desgracia, este se ha vuelto el medio preferido de los delincuentes para llevar a cabo sus crímenes y, con distintos métodos, obtener información personal y robar la identidad de sus víctimas.
Recientemente, han aumentado los reportes que indican que este tipo de estafas se hacen desde números de teléfono con prefijos internacionales. El uso de estos códigos no tan comunes suele generar desconfianza, pero también curiosidad, lo cual aprovechan los estafadores.
Por ello, es vital que todos, como potenciales víctimas, estén informados respecto a los números que más riesgo representan al estar asociados recientemente a las llamadas fraudulentas. Estos son algunos de los identificados por la Comisión Nacional para la Protección y Defensa de los Usuarios de Servicios Financieros (Condusef).
Prefijos identificados como peligrosos
+5281 (México): corresponde a Monterrey, Nuevo León, se relaciona con llamadas automatizadas para cometer fraudes financieros.
+251 (Etiopía): vinculado a ofertas falsas de trabajo, se pide a las víctimas seguir cuentas a cambio de beneficios inexistentes.
+27 (Sudáfrica): utilizado en estafas que simulan vacantes de empleo con condiciones atractivas pero falsas.
+62 (Indonesia): relacionado con intentos de phishing, donde los delincuentes se hacen pasar por empresas o servicios para obtener información confidencial.
Otros ejemplos incluyen: +355 (Albania), +225 (Costa de Marfil), +233 (Ghana) y +234 (Nigeria), asociados a diversas modalidades de fraude.
Contestar a estos números a través de llamadas o mensajes de WhatsApp es peligroso, pues los estafadores usualmente recurren a discursos automatizados y estrategias psicológicas para generar confianza o miedo en las víctimas, incitándoles a proporcionar datos personales o bancarios.
Algunos recurren a falsas ofertas ambiciosas, prometiendo grandes beneficios a cambio de pequeñas acciones como realizar un depósito bancario o acceder a enlaces o documentos falsos (phishing) que faciliten el robo de información sensible como contraseñas o tarjetas.
Si recibes alguna llamada o mensaje de alguno de estos números, o cualquier otro código que parezca internacional, abstente de contestar o trata de verificar su identidad, mientras evitas otorgar información personal. Procura bloquear y reportar números que resulten sospechosos.
También puedes recurrir a mecanismos de prevención como la autenticación en dos pasos o aplicaciones que te alerten sobre números fraudulentos. Si ya has caído en este tipo de estafa, contacta inmediatamente a tu banco para bloquear movimientos no autorizados y denuncia.