Hombres y mujeres buscamos la la manera de hacernos la vida más fácil. Hoy la movilidad es una necesidad vital que se vive día a día. ¿Cómo llegamos al trabajo?, ¿Cómo nos desplazamos? Es difícil imaginarlo sin el uso de un automóvil.
Cuando se trata de comprar un automóvil, una de las primeras cosas que puede preguntarse es si debe comprar uno nuevo o uno usado. Por supuesto, hay ventajas y desventajas para cada uno. Nuevo o usado, un automóvil es una gran compra, pero antes de comprar cualquiera de los dos, es importante saber cuánto puedes pagar, qué necesita, pero sobre todo si tienes o no que reportarlo al Servicio de Administración Tributaria (SAT).
Si bien el proceso de compra de un vehículo usado puede no ser tan sencillo como elegir uno nuevo, todavía hay beneficios definidos al comprar uno usado. Según los expertos, comprar un vehículo usado es mucho mejor para su billetera que comprar uno nuevo. Para la mayoría de las personas, comprar usados ??será una opción mucho mejor.
Comprar un auto usado es un gran paso financiero. Desafortunadamente, un automóvil usado puede tener algunas desventajas. Un automóvil usado podría no ser tan confiable. Cuando compras un automóvil usado, nunca sabrás realmente cómo lo trató el propietario anterior o por lo que ha pasado. Debido a esto, es posible que un automóvil usado no sea tan confiable como un automóvil nuevo.
La Ley para la Prevención e Identificación de operaciones con recursos ilícitos, la compraventa de vehículos nuevos o usados está catalogada como una actividad vulnerable por lo cual se restringe el uso de efectivo para poder liquidar estas operaciones hasta 3,210 veces la UMA. Lo que quiere decir que tienes hasta esta cantidad para pagarlo en efectivo, de acuerdo con Pamela Castro, contadora especialista en impuestos.
La también fundadora de Cooltura Fiscal detalló que, la Ley Antilavado de Dinero establece una lista de aquellas actividades donde es más susceptible a que se cometa este delito y particularmente en la fracción VIII. de Art. 17 se establece como actividad vulnerable la compraventa de vehículos nuevos o usados.
Además de limitar el pago en efectivo hasta por $348’509.70 (cifra actualizada para 2024), la Ley también establece que quien desarrolle actividades vulnerables (en este caso las agencias y concesionarias de autos) tendrán, entre otras obligaciones:
•Identificar a los clientes con quienes realicen las actividades (con su identificación oficial, información sobre su actividad u ocupación basándose entre otros, en su Constancia de Situación Fiscal)
•Presentar avisos ante la Secretaría de Hacienda sobre las actividades vulnerables que se llevaron a cabo y la identificación de los clientes
Ten en cuenta que rebasar el limite de pago en efectivo ya sea en un carro nuevo o usado o no declarar impuestos, te pondrá bajo la mira del SAT, y eso no será una gran idea.
Las ventas entre particulares como aquellas realizadas por personas físicas con actividad empresarial o profesional implican la obligación de pagar el Impuesto Sobre la Renta (ISR) y el Impuesto al Valor Agregado (IVA). Este requerimiento fiscal se aplica sin distinción al tipo de vendedor, ya sea un individuo sin actividad comercial formal o una persona física que se dedique de manera profesional o empresarial a la venta de bienes o servicios.
La ganancia obtenida en una venta se distribuye entre los años transcurridos desde la adquisición inicial del bien hasta su enajenación, con un límite máximo de 20 años. Esta medida tiene como objetivo equilibrar la carga fiscal a lo largo del tiempo. La «ganancia acumulable» se suma a otros ingresos del año y se calcula según las disposiciones de la Ley del Impuesto sobre la Renta (LISR).