Un juez federal bloqueó la polémica ley del gobernador de Texas, Greg Abbott, que daba a sus policías el poder parar detener a cualquiera bajo sospecha de ingresar ilegalmente a Estados Unidos, en una criminalización contra la comunidad latina.
A menos de una semana de que la ley SB4 entre en vigor, el juez David Ezra puso en pausa la medida nombrada “muestra tus papeles”, lo que representa una victoria clave para el Gobierno que la impugnó, pues la migración es prioridad tanto para demócratas como para republicanos de cara a las elecciones de noviembre próximo, pues hoy mismo los aspirantes a la presidencia, Joe Biden, y Donald Trump, visitarán hoy la frontera para remarcar sus políticas en la materia.
Sin abundar en los peligros, el juez declaró a esa ley “no ejecutable”, pues contradice directivas nacionales y pretende anular dicha autoridad, como se ha alegado que en el caso del uso de boyas y alambre de púas en el rio Bravo, al rechazar los argumentos estatales de que luchan contra una invasión de ilegales, en referencia al reciente récord de irrupciones con más de 300 mil en diciembre pasado, de las que casi la mitad corresponden a la entidad, de acuerdo con datos de la Oficina de Aduanas y Protección Fronteriza.
En tanto, activistas alertaron de una evidente criminalización pues con ella se obligaría incluso a residentes a demostrar su estancia legal; de lo contrario podrían ser deportados o encarcelados si no contaban con los papales al ser detenidos por agentes fronterizos o de otras fuerzas en ese territorio.
Texas defiende implementación de ley SB4
El gobernador texano, Greg Abbott, refutó resolución federal al sostener que está decidido a llevar al caso a la Suprema Corte, pues se trata de una defensa de la seguridad y su población.
“No daremos marcha atrás en nuestra lucha para proteger a Texas”, asestó en su cuenta de Twitter al recalcar que está en su derecho de tomar acciones individuales al insistir que la administración de Joe Biden es responsable del flujo migratorio por el que miles abarrotan la frontera con México. Postura que prevén que defienda el también republicano Donald Trump, quien más tarde estará en Eagle Pass.