Tras advertir que está en riesgo el proceso electoral del próximo 2 de junio y por consecuencia la democracia en México, más de 200 organizaciones civiles llamaron a la población a participar en la movilización del domingo 18 de febrero.
A través de la iniciativa Unid@s representantes de la sociedad civil admitieron que existe el riesgo por la posible intervención del Gobierno federal, en particular del presidente Andrés Manuel López Obrador.
“Estamos ante es una elección histórica pero con graves riesgos, desde la observación electoral no estamos de a favor ni en contra de ninguna de las opciones, estamos a favor de que el voto sea libre de amenazas, de chantajes, de miedo, de apatía, a favor de qué el voto se respete y que tengamos las elecciones limpias y pacíficas a las que todos tenemos derecho. En el mundo y América latina la democracia enfrenta riesgo serios y esos riesgos ya no vienen de actores externos, esos riesgos vienen de los mismos a quienes les damos nuestro voto es momento de asumir responsablemente como ciudadanos”, expuso, Mónica Solís Morales de la organización Océano Ciudadano.
En conferencia de prensa, afirmaron que ya tienen confirmada la participación de ciudadanos en 107 ciudades del país y del extranjero que se sumarán de manera simultánea para exigir al presidente que no se meta en la elección.
El empresario, Fernando Belauzarán alertó sobre la posible participación del crimen organizado en el proceso electoral, y señaló que no es posible que el principal delincuente electoral sea el que despacha en Palacio Nacional.
Israel Rivas de Movimiento Nacional por la Salud acusó que el gobierno de López Obrador se haya comprometido a garantizar el abasto de medicamentos y hasta la fecha no se ha cumplido ni con la Megafarmacia que no ha funcionado, aunado a los intentos de desaparecer a los organismos autónomos, hecho que también afectaría la salud de los mexicanos.
Tras lo anterior, convocaron a la sociedad civil a llegar directamente al Zócalo de la Ciudad de México el próximo 18 de febrero para iniciar a las 11 de la mañana, y preferentemente vestir de color rosa y blanco, sin llevar ningún tipo de emblemas partidistas ni referencia a alguna candidatura. Aclararon que por cuestiones de logística ya no será una marcha como originalmente se había previsto.