China.- En este martes desde China se dio a conocer que los equipos de rescate siguen trabajando contra reloj y en medio de una intensa ola de frío para encontrar sobrevivientes tras el terremoto de magnitud 6.2, que sacudió en la noche del lunes las provincias chinas de Gansu y Qinghai.
Por otro lado, dicho fenómeno ha dejado como sado a 127 personas sin vida y 734 heridos de gravedad, también hay al menos 20 personas desaparecidas, los equipos están tratando de encontrarlos pese al temporal utilizando drones, excavadoras y topadoras.
Los equipos temen que las bajas temperaturas dificulten las tareas de auxilio, también a las complicaciones para acceder a las regiones montañosas afectadas por el sismo, y que tuvo su epicentro en la frontera entre las dos citadas provincias.
“Las 72 horas posteriores a un terremoto, cuando es más probable rescatar a los sobrevivientes, se podrían acortar por el mal tiempo, con lo que las víctimas atrapadas se enfrentan a un mayor riesgo”, fue parte de lo mencionado por medios locales.
Mientras que en el caso del Ejecutivo chino y el Ministerio de Gestión de Emergencias decretaron una respuesta de nivel II al siniestro, mismo que afectó especialmente al condado de Jishisan, en Gansu, y a la ciudad de Haidong, en la vecina Qinghai, enviando médicos y material sanitario a la zona del desastre.
De igual forma, han asignado a más de 2 mil bomberos para las tareas de alivio tras el sismo, que dañó más de 150 mil casas en la zona de Jishisan, a lo que hay que sumar interrupciones en el suministro de agua, comunicaciones y electricidad.
Y, por último, las fuerzas armadas participan en las operaciones de rescate y asistencia, para las cuales Pekín ha asignado un monto de 200 millones de yuanes.
