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Esperanza Ortega Azar, presidenta de la Cámara Nacional de la Industria de Transformación (Canacintra), ha alertado sobre la alarmante actividad de la delincuencia organizada en México, que anualmente moviliza más de 10 mil millones de pesos en productos de contrabando en el país.

Durante su participación en el foro «El Control Ilegal de los Mercados Formales y su Impacto Económico y Social», Ortega Azar destacó la magnitud del problema del contrabando en México, que afecta una amplia gama de productos, desde ropa hasta tabaco, alcohol, libros y aparatos electrónicos.

La empresaria hizo un llamado a la sociedad para denunciar el contrabando y la piratería, así como para evitar consumir productos de procedencia ilícita. También enfatizó que estos productos suelen carecer de estándares de calidad y seguridad, lo que pone en riesgo la salud y seguridad de los consumidores.

Los afiliados a Canacintra se comprometieron a trabajar en conjunto con la Agencia Mexicana de Aduanas y colaborar estrechamente con la Secretaría de Hacienda y Crédito Público y el Congreso de la Unión para promover la legislación necesaria que combata de manera efectiva el contrabando y la piratería.

Es relevante señalar que México ocupa el cuarto lugar a nivel mundial en piratería y contrabando, y lidera estos delitos en América Latina. Los sectores más afectados por esta actividad ilegal son el calzado, el tabaco, las bebidas alcohólicas y los productos textiles, según Edgardo Flores Campbell, vicepresidente de Seguridad y Justicia de Canacintra.

Esta situación representa un desafío significativo para el gobierno mexicano, ya que la delincuencia organizada busca ampliar su influencia en diversos mercados, incluyendo la extorsión y el cobro de piso. En medio de esta problemática, se ha destacado la importancia de abordar la crisis institucional y de seguridad que enfrenta el país bajo la administración de Andrés Manuel López Obrador.