Veracruz.-En cinco meses del 2023, la violencia arraigada en municipios de la región norte del estado de Veracruz en la última década, se recrudeció con masacres y homicidios que obligaron a las autoridades del gobierno de Veracruz no solo a reconocer la presencia de grupos criminales, sino a justificar estos actos como una disputa entre cárteles de la delincuencia organizada.
El hecho más reciente ocurrió la madrugada del viernes 19 de mayo, cuando hombres armados ingresaron a un bar en el municipio de Papantla y dispararon a los presentes. El resultado fue de tres personas muertas y tres heridas de gravedad.
El ataque fue grabado y difundido en video por los propios sicarios, quienes mostraron como daban el tiro de gracia a los cuerpos que quedaron en el lugar, mientras atribuían el atentado a un grupo denominado «Gente Nueva».
El gobernador Cuitláhuac García Jiménez lo atribuyó a un ajuste de cuenta entre grupos de la delincuencia organizada. El pasado viernes, tras la reunión de la Mesa de Coordinación por la Paz, informó que se reforzaba la presencia de elementos de seguridad pública estatales y federales en la región entre Papantla y Poza Rica.
Para este lunes, el mandatario informó que se había detenido a ocho personas involucradas en cuatro eventos de violencia diferentes en la región, uno de ellos vinculado al ataque en el bar.
Además, existen indicios que los involucraban con homicidios registrados en el último mes en la región de Poza Rica, así como otros delitos como portación de arma y secuestro.
«Traen conflictos internos y están haciendo ajustes, lamentablemente cobran vidas (…) llevamos por dos hechos 8 detenidos, 4 en eventos diferentes, puesto a disposición por Fiscalía».
Sin embargo, el ataque ocurrido en el Pueblo Mágico el viernes pasado es un hecho que presenta similitud con otros ocurridos de enero a la fecha en la región norte del estado de Veracruz, que sumado a hechos violentos siembran miedo entre la sociedad civil.
