Hombres armados mataron a 20 personas en un ataque ocurrido un local de peleas clandestinas de gallos en el oeste de México, según las autoridades, en una nueva masacre en el país latinoamericano, azotado por la violencia desatada por organizaciones criminales.

El tiroteo, el domingo por la noche, tuvo lugar en Las Tinajas, en el estado de Michoacán, donde el poderoso Cártel Jalisco Nueva Generación ha estado luchando contra bandas locales más pequeñas por el control de las rutas de la droga.

«Fue una masacre de un grupo contra otro en un palenque clandestino donde estaban y llegaron y ahí balacearon a los asistentes y hubo desgraciadamente muchos muertos», detalló el lunes el presidente Andrés Manuel López Obrador al ser consultado por el caso en su rueda de prensa diaria.

Tres de las víctimas eran mujeres, dijo la fiscalía de Michoacán en un comunicado en el que originalmente informó del fallecimiento de 19 personas. En un boletín posterior aclaró que uno de los cinco heridos murió en el traslado al hospital, elevando a 20 el número de decesos.

La fiscalía todavía investiga las circunstancias en que se dieron los hechos para identificar a los responsables, una tarea a la que se sumó el gobierno nacional. «Ya salió un equipo para allá, para la investigación y para atender el tema», añadió López Obrador.

Pese a la nueva matanza, el mandatario volvió a defender su política de «abrazos, no balazos» para enfrentar la inseguridad en el país atacando a las raíces del fenómeno, la pobreza y la corrupción.

«Para el conservador no hay más que el uso de la fuerza, son fascistas, por eso se ríen», dijo sobre las críticas que ha recibido su estrategia, que por ahora no ha frenado el promedio de homicidios dolosos, de cerca de 3,000 al mes.