Escenarios

•Alzheimer y depresión

•Males más tristes

•Rebasada ciencia médica

Luis Velázquez

08 de junio de 2020

UNO. Enfermedades más tristes

Dos de las peores enfermedades, porque además son muy tristes, son el Alzheimer y la Depresión. La vida se va carcomiendo poco a poco en una agonía destructiva, sin que en la mayor parte de los casos, ninguna medicina sea milagrosa.

Lo peor es que se trata de enfermedades hereditarias. “Es de familia” dice una doctora.

DOS. El Alzheimer es más riesgoso

El padre, por ejemplo, demoró 7 años con el Alzheimer y murió de un infarto.

El hermano mayor padeció Alzheimer unos 8 años y también falleció de un ataque al corazón una mañana mientras dormía.

Una hermana murió de la vida vegetativa a la que fue condenada por la depresión.

Y otro hermano vivió la peor pesadilla de la vida con la depresión hasta que un ataque cardiaco se lo llevó.

El padre y 3 hermanos desmigajados por el Alzheimer y la depre.

Quizá el Alzheimer es más riesgoso. Por ejemplo, desde alguna zona recóndita de las neuronas, si el enfermo mira abierta la puerta de la casa suele escapar, sin rumbo fijo.

TRES. Hombre en fuga

Entonces, inicia otra pesadilla que empeora cuando la familia vive en una ciudad, pues en el pueblo, la posibilidad de encontrarlo es mayor.

Un día, el padre de aquella familia se salió de casa hacia las 9, 10 de la mañana, y durante muchas horas anduvo vagando por ahí y los hijos buscándole.

Lo hallaron hacia las 4, 5 de la tarde, de pie, mirando una vieja casona donde vivía una novia de su primera juventud.

Por fortuna, sin un raspón en la piel. Ninguna herida. Quizá, hambriento y sediento.

CUATRO. Vida vegetativa

En los casos del Alzheimer y la depresión, las neuronas se desconectan y se pierde el sentido de la realidad.

En el primer caso, la memoria es la primera perjudicada, pues llega a olvidarse hasta el nombre de uno mismo y ni se diga de la familia.

Y en el segundo caso, se pierde el sentido de la vida y el ansia de vivir.

Es una vida vegetativa, donde las defensas quedan neutralizadas y pocas, excepcionales ocasiones, hay motivos para levantar el ánimo.

CINCO. La depre de Hemingway

Por lo regular, el Alzheimer es progresivo, aun cuando con la depresión suelen darse tiempos buenos y a veces, y para la felicidad familiar, el enfermo se recupera.

La depre es tan canija que, por ejemplo, el padre, un tío y una prima de Ernest Hemingway se quitaron la vida en “un viaje a la oscuridad”, de igual manera como también el Premio Nobel de Literatura, autor de “El viejo y el mar”.

SEIS. Fracaso médico

El hermano mayor de aquella familia con Alzheimer era ingeniero nuclear, egresado de la UNAM. El otro hermano, ingeniero petrolero. Y la hermana, contadora. El padre, veterinario.

Y sin embargo, personas acostumbradas al ejercicio de la memoria, el Alzheimer se adueñó de sus vidas y vivieron entre la realidad, cuando ya nunca entienden porque cada vez olvidan más las cosas, y la irrealidad, el mundo ficticio esperando la muerte.

En la depre, la persona se va hundiendo, y aun cuando unos médicos aseguran que una estrategia para restablecerse es acercar niños al paciente, rara ocasión funciona.

La ciencia médica ha fracasado y quizá otro gallo cantaría a los enfermos y familias si así como ahora en el tiempo del coronavirus los médicos del mundo están apurados buscando un antídoto, también lanzaran una campaña médica mundial para la investigación de una cura contra el Alzheimer y la depresión.

Expediente 2020

Destripadero femenino

Luis Velázquez

08 de enero de 2020

El gobierno federal vendiendo otra vez esperanzas. Ni un feminicidio más dice la secretaría de Gobernación. La titular, jurando que acabará con la violencia, la incertidumbre, la zozobra y la inseguridad contra las mujeres.

Y en contraparte, todos los días, el tiradero de cadáveres. Veracruz, en el primer lugar nacional. Antes, lo fue el Estado de México. Antes, mucho antes, Chihuahua, con Ciudad Juárez como epicentro. Tiempo cuando Jennifer López y Antonio Balderas filmaron una película sobre los asesinatos seriales de mujeres. Ella, reportera. El, director de un medio que los políticos encumbrados pretendían someter.

Nunca como hoy se vive y padece en Veracruz y en el país, el peor tiempo para la población femenina. Casi casi como el duartazgo fue “el peor rincón del mundo para el gremio periodístico”. Y como cuando Veracruz lo fue para los cuarenta mil campesinos asesinados en la década de los treinta, con Manuel Parra, el cacique de “La mano negra” al frente y al servicio de los latifundistas en aquella enconada lucha agraria.

Ni una más dice el gobierno marrón y guinda. Pero en Veracruz, por ejemplo, el tiradero de cadáveres. Mujeres secuestradas, desaparecidas, ultrajadas, torturadas, asesinadas, decapitadas y tirado el cadáver en la vía públicas. Otras veces, debajo de un puente. Otras, en los ríos para flotar aguas abajo.

El colmo: en el destripadero femenino, algunos ministros de Dios han inculpado a las mujeres por la forma provocativa con que visten, ajá.

Los políticos “para lavarse las manos” inculpan al machismo. Otros sectores las culpan de una vida cortesana.

Y la secretaría de Gobernación lanzando el gran descubrimiento de “Respirar y contar hasta diez” para que los malandros se arrepientan.

El discurso oficial, con su venta de esperanzas, por un lado.

Las activistas sociales clamando “Ni una más”, por otro.

“Las Brujas del Mar”, nacidas para luchar contra el feminicidio, su razón fundamental, creyendo que “Un día sin mujeres” bastaría para convertir el país en la tierra prometida para las mujeres solteras, casadas, divorciadas y viudas.

El país, Veracruz, un infierno. Un infierno llamado Veracruz.

FEMINICIDIOS, EN LA IMPUNIDAD

Igual que en el priismo y el panismo, desde palacio nacional, MORENA vende esperanzas a la población femenina.

Y un año y medio después, el tiradero de cadáveres de mujeres sin que nada señale, anuncie, profetice, augure, vaticine la posibilidad de un cambio digno para todas ellas.

Por el contrario, la población, las ONG, los Colectivos, los académicos, cada vez más encendidos.

Sean la inseguridad y la impunidad, el machismo, el alcohol, las drogas, la violencia intrafamiliar, los malandros, los carteles para sembrar el terror, el miedo y el pánico social, el crimen de mujeres alcanza el más alto decibel.

Veracruz, por ejemplo, nunca como ahora, con MORENA (des)gobernando desde el palacio de Xalapa, en la cresta más elevada del feminicidio.

Jamás antes fue imaginado. Nadie contemplaba los días y las noches, los meses y los años más negros, sórdidos, siniestros y sombríos para las mujeres.

Y aun cuando la secretaría de Seguridad Nacional (Alfonso Durazo, futuro candidato de MORENA a gobernador de Sonora) dice que de acuerdo con la estadística Veracruz pasó a segundo lugar nacional en feminicidios, mucho se duda.

Desde el poder y por decreto busca anular la proyección de Veracruz en Veracruz y en el resto del país.

Y sin caer en la rebatinga de la estadística, cada vida humana es invaluable, preciosa e importante. Y con una sola mujer asesinada basta y sobra para evidenciar esa cosita llamada Estado de Derecho, cuya esencia básica es garantizar la seguridad en la vida y en los bienes.

Nadie en Veracruz, por ejemplo, olvida tantos crímenes de mujeres, empezando por aquella guatemalteca emboscada y asesinada en los límites de Isla y Rodríguez Clara en el mes de diciembre del año 2018, y luego enseguida, el secuestro, la desaparición y el crimen de una madre de familia de Coatzacoalcos, esposa de un empresario, luego de dejar a sus hijos en la escuela y cuyo cadáver fue arrojado en la vía pública.

Uno y otro, en la impunidad.

GANAR INDULGENCIAS…

El saldo es negro y desfavorable para el gobierno de Veracruz.

La secretaría de Seguridad Pública y la Fiscalía General de 9 años, juntas, juntitas, han fracasado.

Y sin embargo, formando parte de la dinastía guinda en el trono imperial y faraónico, son inamovibles.

Desencanta el par de dependencias. Han perdido la confianza y la credibilidad ciudadana.

Y como ahí continúan, entonces, y por inercia, arrastran en su caída final hacia el fondo del abismo social al resto del gobierno del estado.

Grave, gravísimo, el desempleo, el subempleo y los salarios insultantes.

Grave la peor calidad educativa y de salud.

Peor el peor desarrollo humano de la población.

Todavía de ñapa, la vida prendida con alfileres. Nadie está seguro. Nadie puede sentirse seguro. A la vuelta de la esquina, un secuestro, una desaparición, un asesinato. Cadáveres colgando de puentes y árboles. Cabezas decapitadas abandonadas en las mesas de bares y cantinas. Mujeres asesinadas cuando la familia se ha declarado en incapacidad económica para cubrir el precio del rescate.

Y los criminales físicos e intelectuales, haciendo y deshaciendo, seguros de su intocabilidad.

El colmo: ladrones solitarios asaltando tiendas comerciales con pistolas de juguete, ¡vaya forma de evidenciar el principio de autoridad!

El vacío de poder que en automático es cubierto por los malosos, sean delincuencia organizada y común.

Pero, bueno, si el lector confía en la autoridad, muchas indulgencias ganará en el cielo.

Barandal

•El peor de los mundos

•Desencanto social

•Desempleo y hambruna

Luis Velázquez

08 de junio de 2020

ESCALERAS: El reporte del INEGI es demoledor. En el tiempo del coronavirus, 12.5 millones de personas dejaron de trabajar. De ese total, 10.4 millones son trabajadores informales. Uno de cada 4 personas, en la subocupación. Y quienes conservaron el empleo, el salario achicado.

Todavía peor: miles de paisanos en Estados Unidos como migrantes sin papeles, a punto de la deportación.

Los paisanos ilegales en el otro lado, extendiendo un SOS al gobierno federal porque allá el mundo es peor que un infierno.

Cien años después de que nunca se padeció una pandemia, el peor de los mundos en el país.

PASAMANOS: Además, el reporte oficial es que cuando el coronavirus se vaya quedarán en México otros doce millones y medio desempleados.

Y el COVID, empalmado con la influenza.

La advertencia de una doctora china de que vendrán doce pandemias, peores que el COVID.

Más la peor recesión desde 1930 en Estados Unidos.

Más la hambruna inevitable.

Los jefes de familia, sin un ingreso fijo y estable, agravado su estado emocional y neurológico por los niños hambrientos, dispuestos a todo.

En casa, la familia necesita comer.

“La difícil ciencia de vivir” le llamaba Albert Camus, quien en su novela “La peste” describe el peor de los mundos, tiempo cuando en las calles y avenidas quedan muertos los seres humanos y las ratas.

CORREDORES: Así como estamos y vamos, Amlove está lejos de ser el presidente de la 4T, la purificación moral, la honestidad valiente y la Cartilla Moral.

Será, es mejor dicho, el presidente del coronavirus, y por más y más giritas en el país, la realidad estrujante resulta inevitable.

Uno, el virus. Dos, la recesión con la espantosa jodidez económica y social. Y tres, la hambruna.

Adiós, adiosito, a una mejor calidad de vida para la población. 6 de cada diez mexicanos, en la miseria y la pobreza.

BALCONES: En un año y medio de MORENA en el poder público, los ricos se han vuelto más ricos, caso, por ejemplo, Carlos Slim Helú y Ricardo Salinas Pliego.

Y los pobres, más pobres.

El dato del INEGI resulta escalofriante. De los 12.5 millones de mexicanos que dejaron de laborar por el COVID, 10.4 millones, trabajadores informales.

Carpinteros, pintores, electricistas, volovaneros, esquiteros, churreros, trabajadoras domésticas y sexuales, y un largo etcétera.

Es decir, y como siempre ha sucedido en la historia, los pobres, los más jodidos en el tiempo de la pandemia.

PASILLOS: Amlove y los suyos continuarán echando leña a los antecesores. Si el país está jodido es culpa de ellos, los conservadores, los neoliberales, los emisarios del pasado, “la mafia del poder”, los priistas y los panistas y los perredistas.

Y ni modo que nosotros, los puros, los impolutos, los enviados de Dios, los iluminados, hagamos milagros.

El país, entonces, reducido a la imagen de Héctor Suárez, fallecido el 2 de junio. “El Mil Usos”, su gran película exitosa. Partió de su casa en un pueblito rural a buscar su destino. Se instaló en la Ciudad de México y le fue peor. Soñó con entrar a Estados Unidos y no pudo. El filme termina cuando regresa a su rancho.

VENTANAS: Hay programas sociales del obradorismo, igual, igualitos, que en el priismo y el panismo.

Unos centavitos bimensuales para aplacar el hambre, pero sin ofrecer expectativas superiores de un trabajo digno, estable y pagado con justicia laboral.

La izquierda ascendió al poder, pero más allá de las pasioncillas partidistas y empresariales, pronto el desencanto ganó a la esperanza social y familiar.

Malecón del Paseo

•Fuerza de los brujos
•Karma y buena vibra
•Los astros a favor

Luis velázquez
08 de junio de 2020

EMBARCADERO: La felicidad más grande para muchas personas está en que un adivinador, una gitana, un brujo, un chamán, les lea las cartas o las rayas en las palmas de la mano o los asientos del café… Insólito: políticos y funcionarios públicos también los  consultan… Bastaría referir que Francisco Ignacio Madero y Plutarco Elías Calles creían en los médiums y asistían a sesiones espiritistas… La primera secretaria del Medio Ambiente de Amlove cree en los duendes… La versión pública es que Marta Sahagún de Fox tenía sus chamanes de cabecera en Los Pinos… Fidel Herrera Beltrán viajaba a Cuba en el avión oficial para consultar a los santeros… Javier Duarte y parte de su gabinete legal hablaba del mal karma y la buena vibra…

ROMPEOLAS: El primer viernes de marzo es la fecha clave de quienes creen en los brujos… Pero desde luego, todos los días se da… En los mercados populares, por ejemplo, siempre hay un adivinador… Se trata de un oficio bien remunerado pues hay personas que únicamente salen a la calle luego de que les adivinan la suerte en el día con día… Incluso, hay quienes leen el horóscopo para definir sus horas del día y de la noche… Y si los astros, que estarían bien acomodaditos, dicen, por ejemplo, que no salgas ese día a la calle, la persona queda concentrada en casa… Miles de personas de ambos sexos se dedican a toda clase de profecías, consejos espirituales y a preparar pócimas para la buena y la mala suerte…

ASTILLEROS: En la prensa escrita y en las revistas del corazón y hasta en los programas televisivos hay chamanes adivinando la suerte… Antes, en el siglo pasado, cada año se efectuaba congreso nacional de brujos… Hay un llamado Brujo Mayor, quien toda su vida, desde jovencito, vive de adivinar el futuro mediato e inmediato de las personas… En la vieja Roma, cuenta Suetonio en el libro clásico, «Los doce Césares», había emperadores que creían a ciegas en los chamanes… Los tenían de cabecera… También  los reyes aztecas andaban en las mismas… Las fuerzas esotéricas del más allá gobernando los días y las noches del mundo, con todo y que Ignacio Ramírez, El nigromante, ministro de Estado con Benito Juárez, asegurara que Dios no existe y menos, mucho menos, el diablo, anexos y conexos, entre quienes se incluyen a los brujos…

ESCOLLERAS: En todos los pueblos hay chamanes y tienen clientela… De acuerdo con las versiones, el mayor número de personas pide la mala suerte para un adversario, un enemigo, una gente indeseable e incómoda, incluso, hasta para eliminar del camino a competidoras en el amor y la pasión… Se da en todos los niveles, así se tengan maestrías y doctorados… La creencia está en todas las capas sociales… ¡Caray, para qué Francisco I. Madero y Elías Calles creyeran en los médiums significa palabras mayores!… Jaime Mausan quedó demasiado corto con sus extraterrestres… Para los jefes tribales en el relato bíblico eran la figura equivalente a Luzbel, el rey del mal…

PLAZOLETA: Verdad o mentira, fuego artificial explorando y explotando la naturaleza humana, medias verdades o medias mentiras, demasiados hogares, familias, relaciones, amigos, compadres, han sido destrozados por el mal fario… Y por eso, la vigencia de los adivinadores… Inverosímil, a cada rato en la prensa escrita publican avisos de gratitud a la llamada «Santa Muerte» por favores recibidos, cuando, caray, la vida humana termina con la muerte y luego, nada hay, ni cielo ni infierno, «polvo eres y en polvo te convertirás»… Pero, bueno, en la lucha por las creencias esotéricas «cada cabeza es un mundo»…

PALMERAS: Un cuento de Gabriel García Márquez narra la historia de una mujer que se alquilaba para soñar… Y era tan certera que las familias la contrataban en exclusiva y hasta para vivir con ellos, en casa, y todas las mañanas, la familia, más el esposo, le preguntaban sobre su viaje onírico de cada noche y si el sueño había tenido relación con alguno de ellos… De hecho y derecho, cada día se movían de acuerdo con el sueño de aquella mujer…