viernes, abril 26, 2024

Expediente 2020

Estercolero guinda y marrón

Por Luis Velázquez

Mientras la senadora de MORENA, Claudia Balderas, originaria de Nanchital, y su asesor, Mario Espinoza (luchador de artes marciales y cocinero y 60 mil pesos mensuales de sueldo, milagro de la 4T) escenificaban otro escándalo y en la Ciudad de México los detuvieron con una bolsita, todo indica, de  cocaína…
Y en tanto el góber jarocho de AMLO cacarea y cacarea que irán por funcionarios yunistas…
Y mientras la SEDARPA compra trece camionetas de lujo para acelerar el desarrollo del campo y mejorar y enaltecer la calidad de vida de los campesinos, dos millones en Veracruz, un millón de indígenas…
Y en tanto la secretaria de Turismo le pone playas bonitas, muy bonitas, a Poza Rica…
Y mientras 4 policías son asesinados en Córdoba en un fuego cruzado donde también cayeron muertos tres civiles…
Y en tanto cada día hay más y más y más feminicidios…
En Ciudad Mendoza, las familias de 7 tianguistas sufren el peor infierno de sus vidas.
Desde hace 4 meses, sus parientes desaparecieron en Ixtaczoquitlán a manos de policías municipales.
La secretaría de Seguridad Pública, con tanto oleaje de incertidumbre y zozobra, ya se olvidó del secuestro y desaparición (desaparición forzada, dado que los secuestradores fueron policías), y la Fiscalía anda en el limbo, soñando con suprimir, igual que el Fiscal General de la República, Alejandro Gertz Manero, el delito de feminicidio.
Las familias dijeron al reportero Antonio Osorio Ojeda:
«Hace 4 meses fueron desaparecidos. Y no hay resultados de nada. Ya es mucho tiempo. Y la autoridad nos tiene igual. Sin saber nada de ellos».
Lo peor de todo… es que el gobierno de Veracruz siga haciéndose guaje como si Dios les hablara, y los 7 tianguistas desaparecidos caigan en el olvido oficial, aun cuando pareciera que ya cayeron.
Primer delito: el secuestro de los 7 tianguistas.
Segundo delito: la desaparición.
Tercer delito: la impunidad.
Cuarto delito: ninguna autoridad los está buscando.
Quinto delito: la autoridad vendiendo esperanzas.
Sexto delito: la autoridad «tomando el pelo» a los familiares.

Séptimo delito: el olvido, el peor de todos.

LOS TIANGUISTAS DESAPARECIDOS

Ellos son:
Jorge Obet y Joel Reyes Flores, de 41 y 43 años de edad.
Luisa Carrera Valdés, de 30 años, esposa de Joel Reyes Flores.
Ricardo Montesinos Núñez, de 20 años.
Daniel García Reyes, de 25 años.
Humberto Gil García, de 32 años.
Y Jorge Alducin, de 45 años.
El 26 de octubre de 2019 salieron de sus casas en Ciudad Mendoza para la venta del tianguis en Fortín.
Y cuando de regreso a sus casas, hacia las 16:35 horas, pasaron por Ixtaczoquitlán, a la altura del bulevar Fernando Gutiérrez Barrios, fueron levantados por la policía… con el pretexto de alterar el orden público y faltas a la autoridad.
Al frente de los elementos policiacos iba Adán Hernández Suárez.
Y desde entonces, desaparecidos.

RETRATO DEL PODER: TODOS SORDOS

La desaparición significa, y de entrada, uno de los peores atropellos a los derechos humanos.
Segundo, la desaparición forzada y que a la luz del derecho internacional significa la alianza de los políticos (en el caso, el director de Gobernación del Ayuntamiento de Ixtaczoquitlán, Octavio Alejandro Pérez) y los jefes policiacos y los policías para desaparecer personas.
Y en el caso, se ignora si también la alianza de los carteles.
Y más cuando luego de que los 7 tianguistas fueron liberados…
Y las familias pagaron la multa…
De pronto, ¡zas!, fueron levantados por unos sujetos desconocidos quienes los treparon a una camioneta de color rojo con rumbo desconocido… hasta el día de hoy.
Una carambola que, se deriva, habría operado por el triángulo de la muerte en el pueblo.
Primer triángulo: la policía.
Segundo triángulo: el director de Gobernación.
Y tercer triángulo: los malosos.
Los 7 tianguistas vendían ropa para llevar el itacate y la torta a casa.
La única chamba dado el fracaso de la errática politica económica, incapaz de alentar la creación de empleos y de empleos dignos para la población.
De nada han servido las marchas y caminatas.
Sordo, el gobernador.
Sordo, el secretario de Seguridad Pública.
Sorda, la Fiscal.
Sordo, el presidente municipal de Ixtaczoquitlán, Miguel Ángel Castelán Crivelli.
Sorda, la diputada María Francisco Candelas Doce.
He ahí el retrato del poder guinda y marrón. El estilo personal de ejercer el poder de la generación política de MORENA en el trono imperial y faraónico.
Los familiares de los 7 tianguistas están en el Colectivo de Familias de Desaparecidos de Córdoba-Orizaba con la esperanza firme, inalterable, de encontrar a sus parientes.
4 meses después, el vacío. El limbo. El silencio. La indiferencia. El desdén. El menosprecio. El valemadrismo.
El tiempo de MORENA en Veracruz. La desaparición forzada en el sexenio de Javier Duarte, vigente en el primer sexenio de izquierda en el siglo XXI de Veracruz.

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