•Ramalazo a los medios
•Cambios a ley de imprenta
•Multas serán endurecidas
Luis Velázquez
06 de enero de 2020
EMBARCADERO: Después del rafagueo obradorista a los medios y reporteros en las conferencias mañaneras, “ya apareció el peine”… En el Congreso de la Unión debaten una iniciativa de ley sobre los delitos de imprenta para actualizarse luego de 83 años de vigencia, desde 1917 cuando fue publicada la ley por Venustiano Carranza… Entonces, y por ejemplo, la ley contemplaba una multa de veinte a dos mil pesos a trabajadores de la información y medios por ataques a la vida privada, la moral, el orden y la paz pública…
ROMPEOLAS: Pero como los diputados federales sienten que 83 años después ha de predominar una multa más fuerte en contra de los medios, entonces, la reforma a la ley está cocinándose, pues, se entiende, nunca será igual el México de Venustiano Carranza al México de Andrés Manuel López Obrador… Y ni hablar, es la hora de los ajustes… Nadie dude, por ejemplo, que de paso endurecerían la ley para, entre otras cositas, aumentar el pago por daño moral que los políticos pudieran argumentar en contra de los periodistas que se pasaran de tueste… Incluso, hasta bajo la ley porfirista de “Pan o palo”…
ASTILLEROS: Desde 1917 cuando fue publicada la Ley de Imprenta, nunca le han agregado cambios sustanciales ni tampoco puesta bajo el microscopio social, moral y político… Y más, cuando durante tantos años de hegemonía priista existió, digamos, un entendimiento entre políticos y magnates periodísticos… Y en caso de desaguisados, las elites políticas recurrían al daño moral, como fuera, por ejemplo, cuando la esposa de José López Portillo, Sasha Montenegro, demandara a una reportera por daño moral y la columnista debió vender su casa para pagar el monto correspondiente…
ESCOLLERAS: En otros casos fue peor… Por ejemplo, cuando Gustavo Díaz Ordaz ordenó incendiar las instalaciones de la revista Por qué?, de Mario Renato Menéndez Rodríguez, a quien, además, exiliaron en Cuba… O cuando Luis Echeverría Álvarez instrumentó un golpe de Estado al Excélsior dirigido por don Julio Scherer García y fue lanzado con más de doscientos reporteros, fotógrafos y editores… Ahora, en el tiempo de la República Amorosa y la Cartilla Moral, el obradorismo ha considerado que basta y sobra con aumentar las multas por ataques a la vida privada, la moral, el orden y la paz pública, y la iniciativa de ley camina triunfante…
PLAZOLETA: El apretón de tuercas contra los medios se está dando por todos lados… 1) La reducción del presupuesto federal y de los estados a los medios bajo la ley porfirista de “Pan o palo”… Pan, para los medios afines, y palo, para los conservadores… 2) El rafagueo diario en las conferencias mañaneras contra los medios y reporteros incómodos e indeseables… 3) La satanización oficial contra los medios críticos, ligándolos una y otra y otra y otra ocasión al priismo y el panismo… 4) La exhibida diaria a través de las redes sociales a los trabajadores de la información críticos… 5) La llave abierta, como en los mejores tiempos pasados, a los medios amigos… 6) Las denuncias de legisladores federales de conspiraciones mediáticas en contra de gobernadores como el caso de la senadora Gloria Sánchez “desgarrándose las vestiduras” en nombre de Cuitláhuac García…
PALMERAS: 7) La exhibida de los medios de que hay convenios “pero chiquitos, muy chiquititos” como dice Cuitláhuac… Y 8) El ataque cibernético de los chairos y Siervos de la Nación a la prensa incómoda… Y, de ñapa, modificar los delitos de imprenta para aumentar las multas que bien pudieran incrementarse a multas prohibitivas para dejar en la calle a los reporteros…
