La mañana de ayer en su conferencia matutina el presidente de México, Andrés Manuel López Obrador (AMLO), mostró satisfacción con el nombramiento de Rosario Piedra Ibarra como nueva titular de la Comisión Nacional de Derechos Humanos (CNDH) y reiteró su confianza de que en este período se profundizará en las investigaciones haciendo valer la justicia.

Manifestando que la llegada de Piedra Ibarra aumenta la posibilidad de que la CNDH “deje de ser una pantalla, un organismo alcahuete del régimen y se profundice en las investigaciones, se acabe con la impunidad y se le dé una respuesta a los familiares de las víctimas”.

El presidente se mostró contento, mencionó que era normal que los conservadores “quisieran tener gente disciplinada, a modo como ha sucedido en todo el periodo neoliberal, puro experto, que se distinguía por cobrar bastante por su especialidad, pero al mismo tiempo siempre guardaban un silencio cómplice, encubrían, nada se sabía, a nadie se castigaba”.

Aclaró que no quiere la desaparición de instancias como el Instituto Nacional Electoral (INE), el Tribunal Electoral federal o el Instituto Nacional de Transparencia, sin embargo, López Obrador sustentó que éstos organismos, “ineficientes por decir lo menos”, remarcando que se han pasado por alto muchas situaciones, además de costar mucho dinero a la población.