•Trágico final de los héroes
•Muchos, en pobreza canija
•Otros más, traicionados
Luis Velázquez
16 de agosto de 2019
EMBARCADERO: Muchos escritores, reporteros, intelectuales y políticos tuvieron un final trágico… Sus vidas fueron una lumbrera, pero el final de sus días, demasiado cruel… Por ejemplo, a las 24 años de edad, el poeta Manuel Acuña se suicidó tomando cianuro… Se quitó la vida porque la musa de aquel tiempo, deseada y amada por todos los poetas, Rosario de la Peña, de 19 años, lo menospreció… Y la vida sin ella, era, claro, inconcebible…
ROMPEOLAS: Manuel María Flores, su rival en amores, preferido por Rosario de la Peña, murió ciego y en la pobreza más franciscana… A pesar, incluso, de tanta notoriedad literaria… Ignacio Ramírez, El nigromante (otro enamorado de Rosario), ministro de Asuntos Religiosos de Benito Juárez, diputado federal, periodista crítico, murió en la total pobreza… Su familia lo veló en la sala de su casa alquilada en las goteras de la ciudad… Su discípulo, Ignacio Manuel Altamirano, quien trabajara en puestos consulares en el extranjero con Porfirio Díaz, murió muy pobre… La familia necesitó vender los muebles de la casa para el sepelio
ASTILLEROS: Ricardo Flores Magón, el fundador del periódico “Regeneración” murió en una cárcel de Estados Unidos… De acuerdo con unas versiones, por vieja enfermedad, y otros, asesinado a puñaladas… Un día, y desde la cárcel, Flores Magón envió una carta a su hermano, funcionario público, solicitando un préstamo para el sostén de su esposa y su hija adoptiva… Y en la carta le juraba y perjuraba que el dinerito era para la manutención de su familia, en ningún momento para publicar “Regeneración” según cuenta el escritor José Emilio Pacheco en su columna “Inventario”…
ESCOLLERAS: Alejandro Magno, el conquistador del mundo, desde Roma hasta Asia, se creyó dios, fue asesinado por los suyos… Y luego, los suyos, generales todos, se repartieron el poder público y las tierras conquistadas… Uno de ellos, ordenó asesinar a su señora madre, y a su esposa y a su hijo de 8 años, sucesor natural al trono imperial y faraónico… Álvaro Obregón, recién reelecto presidente de la república, fue a una comida en el restaurante “La Bombilla”, de la Ciudad de México, pidió un plato con mole y arroz y tortillitas echadas a mano, y de pronto, ¡zas!, la muerte lo alcanzó con el caricaturista José de Jesús León Toral, quien lo agarró a tiros y su cabeza cayó encima del plato…
PLAZOLETA: Jesús murió crucificado a los 33 años de edad y Ernesto “El che” Guevara murió de 39 años asesinado en la sierra de Bolivia cuando soñaba con crear en América Latina muchos Vietnam, muchos Cuba, para liberarse de la bota militar de Estados Unidos… Emiliano Zapata fue asesinado cuando tenía 40 años en una emboscada por el general Jesús Guajardo, quien le fingió amistad y luego de obsequiarle un caballo (“El as de oro”) lo invitó a comer única y exclusivamente para matarlo… Pancho Villa también fue emboscado y asesinado a los 40 años, siempre se afirmó, por órdenes de Álvaro Obregón, quien le tenía envidia a su genio militar…
PALMERAS: Francisco Ignacio Madero y su vicepresidente, José María Pino Suárez, fueron asesinados a los 40 años por órdenes de Victoriano Huerta… Los treparon a un automóvil y en las goteras de la Ciudad de México los soldados descargaron sus pistolas y les dieron el tiro de gracia… De finales trágicos está poblada la vida pública y privada en México… Lo dijo Carlos Fuentes en una de sus novelas: “¡La vida es así y qué le vamos hacer!”…