Los peores 32 segundos de Cuitláhuac
Luis Velázquez
04 de junio de 2019
Los ojos cuchilleros, filosos, de Cuitláhuac se clavaron en el tropel de reporteros, las manos extendidas con las grabadoras sobre AMLO. Era demasiado tarde. La pregunta incómoda ya estaba al presidente de la república.
Fueron los 32 segundos más terribles y espantosos en el primer semestre del gobernador de MORENA en Veracruz.
“¿Sabe usted que el gobernador tiene a su primo Eleazar Guerrero en la SEFIPLAN? le lanzó un diarista como fardo, misil, bomba nuclear.
Respuesta del señor presidente:
“Yo no vengo a eso ahora…”.
Contra/respuesta:
“¿Pero sabía usted que es el primo del gobernador?”
Respuesta:
“No sabía yo”.
Todo, en 32 segundos según describe la reportera Sandra Segura, Notiver, 2 de junio.
Inverosímil, entonces, que la prensa quisquillosa le hiciera travesuras a Cuitláhuac, el socialista más fregón del Golfo de México, el graduado en Alemania, el luchador social, político y electoral que derrotara a Miguel Ángel Yunes Linares en las urnas, el ideólogo de MORENA en la tierra jarocha, aquí, donde en 1940, unos cuarenta mil campesinos fueron asesinados en el tiempo aquel de la enconada lucha agraria reprimida por Manuel Parra, el jefe máximo de “La mano negra”.
“La mirada preñada de mal humor” y cólera (Ricardo Garibay, “Lo que ve el que vive”) se encendió más. Parecía tener encima la kriptonita de Superman.
De un príncipe que caminaba como rey de opereta luego del vitoreo de AMLO y la levantada de mano, el góber, aguantando vara ante un reportero que está lejos, lejísimos de ser amansado.
Y más, porque encima de MORENA y “Los siervos de la nación” y los chairos y la Cuarta Transformación está el primo Eleazar Guerrero quien ha de disfrutar el paraíso terrenal, el sexenio de leche y miel, y que en el duartazgo y en el fidelazgo también estuvo cerca de la ubre, y ni modo ahora, con el primo como jefe máximo fuera excluido.
“CIRCO MONTADO PARA AFECTAR A CUITLÁHUAC”
En las mismas horas, el secretario de Salud, conocido como “El besucón” en las redes sociales, gritoneaba que la denuncia en medios sobre la compra de medicinas a una empresa propiedad del súper delegado en Jalisco, Carlos Lomelí, fue “un circo montado para afectar la imagen de” Cuitláhuac.
¡Ay, Cuitláhuac, el dios carnal del sexenio que camina!
Pero el caso del nepotismo, amiguismo y cuatismo en Veracruz es viejo. Digamos, data desde hace un semestre cuando MORENA entrara al palacio de Xalapa.
Eleazar Guerrero, cierto, subsecretario de Finanzas y Planeación, y en el pasillo palaciego la versión de que le fueron concesionadas todas o casi todas las direcciones administrativas del gabinete legal que posgrado tuvo en el duartazgo y el fidelato en el mismo cargo en la secretaría de Seguridad Pública.
Además, claro, de un par de hijos en la nómina y en puestos gubernamentales.
Y oh paradoja, “el orgullo de mi nepotismo” en varias secretarías y que llevara, a partir de la secretaría de Trabajo y Previsión Social, a la Contralora Leslie Garibo a decir que iniciaría ya, ya, ya, una investigación sobre la compra de patrullas, ambulancias y medicinas, quizá, y como dice la canción, “para abril o para mayo” del año entrante, porque éstos ya se fueron (Notiver, 24 de mayo, 2019).
AMLO, mínimo, habría quedado con la duda clavada. Y si así como despidió a la secretaria del Medio Ambiente por atrasar un vuelo aéreo 40 minutos, entonces, ya se verá si la pregunta del reportero incómodo trasciende en la vida pública y el presidente de la república lo checa o en todo caso, él mismo gobernador enmienda la plana y purifica la imagen moral de su sexenio, vaya a ser que el presidente de la república aseste un manotazo.
IGUAL QUE EN EL PRIISMO, TODOS SE ENCUBREN…
Pero…pero resulta que desde la LXV Legislatura, el diputado local de MORENA, Érick Domínguez Vázquez, presidente de la Comisión de Vigilancia, reviró a la Contralora y dijo que por ningún motivo, razón o pretexto, menos por una preguntita periodística, pedirán a los secretarios de Cuitlalandia rendir cuentas sobre la compra de medicinas, patrullas y ambulancias sin licitación (Notiver, 31 de mayo, 2019).
Y si así se portan los señores diputados de la 4T (Cuarta Transformación), entonces, el subsecretario, primo de Cuitláhuac, Eleazar Guerrero, seguirá durmiendo en paz. “Nadie lo tocará ni con el pétalo de una rosa” decía, a propósito de las mujeres, el poeta churrigueresco, “Mamado” Nervo.
Incluso, burlón, irónico, Érick Domínguez pidió que tengan paciencia, pues la rendición de cuentas será hasta el mes de noviembre y ya se verá, ya se verá.
Una cosita, entonces, es purificar la administración pública y otra, mil años luz de distancia, la filosofía social y política de AMLO, porque aquí, en Veracruz, “solo truenan los chicharrones” de Cuitláhuac, anexos y conexos, incluido Zenyazen.
Sigan, pues, las puertas y ventanas abiertas del nepotismo en el reino de Cuitlalandia.
La Contralora quiso, digamos igual que Poncio Pilatos, lavarse las manos en agua limpiecita y fresca y lanzó la posibilidad.
Pero desde el Congreso, el presidente de la Comisión de Vigilancia le advirtió que paren máquinas, porque todo es improcedente y ha de esperarse el tiempo.
Durante 32 segundos los ojos cuchilleros de Cuitláhuac casi despedazaron al reportero incómodo. Pronto, quizá ya, los chairos le habrían caído encima.
