Señales presidenciales para Cuitláhuac

Por Atticuss Licona

Bien dicen que a veces en política vale más lo que no se dice… que lo que se dice.

Y esto quedó de manifiesto en la excelente entrevista que otorgó en exclusiva para Oliva Noticias la tarde de este miércoles el Coordinador General de Comunicación Social y Vocero del Gobierno de la República, Jesús Ramírez Cuevas.

En la entrevista realizada por el periodista Alejandro Aguirre Guerrero, Jesús Ramírez fue parco y muy tacaño al señalar virtudes y resultados del gobernador Cuitláhuac García Jiménez a quien no le dedicó ni una sola flor y más bien ofreció un rosario de consejos para que se ponga las pilas.

Es evidente la diferencia abismal entre la aceptación del Presidente López Obrador y Cuitláhuac, cosa que Ramírez Cuevas achaca a que “La patria chica siempre tiene más sentimientos y causa más pasiones”. Dijo que los gobernadores al ser un nivel más inmediato de atención, están más cercanos al sentimiento de la gente y hay un cuestionamiento más permanente y directo.

La ausencia total de justificaciones y señalamiento de puntos positivos del góber por parte del Vocero Presidencial, a estas alturas debe seguir taladrando la mente de muchos políticos morenistas veracruzanos. La olvidada ortodoxia marcaba que incluso hasta a los enemigos políticos no se les deben escatimar laureles, pero con Cuitláhuac no hubo nada.

En los más de trece minutos que duró la entrevista, Jesús Ramírez, voz de López Obrador, no obsequió ni un halago, ni un obsequio aunque sea de caridad para destacar la fortaleza gubernamental o que va el góber por buen camino. Antes que eso, Jesús habló también de los gobernadores mal evaluados y no sacó de ese costal al gobernador de Veracruz pues dijo que “La gente está queriendo buenos gobiernos de Morena o de quien sea, y aunque aquí hay un beneficio de la duda, se le dio el voto de los ciudadanos y ahora hay que demostrar con hechos, ese es el reto de todos”.

Advirtió el Vocero de la Presidencia que se debe “Demostrar con hechos que se está trabajando en beneficio de la gente, que se es eficaz y que se están atendiendo los problemas”. Pero eso sí, destacó para finalizar que “La vara que mide es pareja para todos y estamos obligados a cumplir, no podemos  ser iguales que los corruptos del pasado, mantenernos en la inercia y la indiferencia burocrática y postración en la que ha estado el gobierno, tenemos que empujar de más, dedicar más tiempo”.

Jesús Ramírez ha dejado en el ambiente un viento lo suficientemente gélido para congelar a cualquier gobierno, pero tampoco cerró las puertas, son si acaso los primeros mensajes cifrados de una narrativa en espiral descendente que podría llevar al gobernador a estadios nada deseables. Quien pierde la confianza, pierde la batalla, pero la receta está ahí, Ramírez Cuevas no se la ocultó a Cuitláhuac. El góber debe empujar más, dedicar más tiempo y demostrar con acciones que es eficaz, nada menos que eso pues lo dice el Vocero Presidencial.

Así que don Cuitláhuac, quien tenga oídos… que oiga.