La expresidenta de Argentina, Cristina Fernández de Kirchner, fue citada a declarar por segunda vez, en el marco de la causa en la que se le acusa de haber encabezado una asociación ilícita para cobrar millonarios sobornos.

El juez Claudio Bonadío, quien está a cargo de la investigación, convocó a Fernández de Kirchner a los tribunales el próximo lunes, el mismo día en el que también comparecerá su exministro de Planificación, Julio de Vido.

A la lista de indagados se sumarán Eduardo de Pedro, José Ottavis y Andrés Larroque, tres dirigentes de la organización kirchnerista «La Cámpora», y el empresario Sergio Szpolski, entre otros.

El citatorio de Bonadío a Fernández de Kirchner se dio a conocer en medio de la tensión que provocó en Argentina una nueva devaluación, que fue la respuesta a un mensaje con el que el presidente Mauricio Macri intentó tranquilizar a los mercados, pero no tuvo éxito.

La expresidenta, de hecho, vinculó su nueva convocatoria a declarar como una manera de tapar la crisis económica. «El dólar está por llegar a los 35 pesos y Bonadío me vuelve a llamar a indagatoria en la misma causa de los allanamientos. Son de manual», escribió en sus redes sociales la exmandataria y actual senadora.

Fernández de Kirchner declaró el pasado 13 de agosto en la causa que comenzó con el descubrimiento de ocho cuadernos en los que supuestamente un chofer de un importante exfuncionario registró los pagos de unos 200 millones de dólares.

De acuerdo con Bonadío, la asociación ilícita que montaron exfuncionarios y empresarios la encabezaron la expresidenta y su fallecido esposo y antecesor, Néstor Kirchner.

En su primera presentación por esta causa, Fernández de Kirchner presentó tres escritos en los que negó todas las acusaciones, se dijo víctima de una persecución política y judicial, y dudó de la idoneidad del juez Bonadío.