Un estudio realizado en la Facultad de Medicina de la Universidad de Harvard, en Estados Unidos, revela que padecer diabetes tipo 2 por años y sin un control adecuado disminuye la capacidad cognitiva de los pacientes, la cual incluye el aprendizaje, el razonamiento, la atención, la memoria, la resolución de problemas y la toma de decisiones.

El cerebro requiere un flujo sanguíneo adecuado para garantizar la distribución de la sangre y así cumplir con sus funciones. No obstante, en personas con diabetes tipo 2 sin un control metabólico, se genera una inflamación a causa de los niveles elevados de glucosa que hacen que los vasos sanguíneos no regulen de forma adecuada la circulación sanguínea por todo el órgano.

A la misma conclusión llegó un grupo de investigadores de la Universidad Michoacana de San Nicolás Hidalgo (UMSNH). El equipo científico liderado por la doctora Ixchel Herrera Guzmán estudió el vínculo entre las alteraciones cognitivas y el control de glucosa en sangre en derechohabientes de una Unidad de Medicina Familiar del Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS).

“Los niveles elevados de azúcar en la sangre ocasionan una reducción del flujo sanguíneo en el sistema nervioso central, por lo que sus funciones se ven afectadas”, resalta la investigadora. Para realizar las evaluaciones cognitivas utilizaron diversas pruebas, como un miniexamen del estado mental, pruebas de dibujo, medición del nivel de depresión, así como de la discapacidad funcional de los participantes del estudio.

Entre los resultados se encontró que más de la tercera parte de los pacientes obtuvo calificaciones bajas en las pruebas de dibujo y esos resultados fueron iguales a los de la función cognitiva. “Lo anterior sugiere la existencia de una asociación entre el trastorno cognitivo y el inadecuado control de la glucosa en sangre”, señaló la doctora Herrera Guzmán.

Asimismo, agregó que tales hallazgos indican la importancia de que los pacientes con diabetes tengan un buen control de sus niveles de glucosa y vigilen síntomas que sugieran problemas cognitivos, como fallas en la memoria, el aprendizaje, dificultad para concentrarse y en la toma de decisiones.

La especialista recomienda, sobre todo, seguir las indicaciones médicas en cuanto a la toma de los fármacos, seguir una alimentación sana, practicar ejercicio, monitorear la glucosa, dejar de fumar y tener la mente activa mediante la lectura, los juegos de memoria, la solución de crucigramas y juegos de palabras y la práctica de yoga.