Xalapa, Ver.
Durante la presentación de la coalición Juntos Haremos Historia, el dirigente estatal del PES, Gonzalo Guízar Valladares, dijo que José Antonio Meade Kuribreña es un buen muchacho con una trayectoria aceptable, pero detrás de él está el viejo PRI que ya no quieren los mexicanos, representa a los más de 10 gobernadores procesados por corrupción, y como secretario de Hacienda, Meade tuvo en sus manos a Javier Duarte, «era suyo y lo dejó ir».
En conferencia de prensa, los dirigentes estatales del PT, Vicente Aguilar Aguilar, de Morena, Manuel Huerta Ladrón de Guevara, y del PES, Gonzalo Guízar Valladares, indicaron que la coalición de partidos Juntos Haremos Historia tiene amplias posibilidades de ganar la presidencia con Andrés Manuel López Obrador.
El también diputado federal y presidente de la Comisión de Relaciones Exteriores, Gonzalo Guízar Valladares, expresó que la bancada de su partido hizo un reconocimiento amplio a las fuerzas armadas, «a la Marina y al Ejército, quienes gozan del reconocimiento de todos los ciudadanos mexicanos».
Cuestionado sobre la ley mordaza, sobre la forma en que cada partido votó por y contra de ella, el legislador del PES dijo que cada partido tiene la libertad de actuar: «legalmente, una coalición no es una fusión, una fusión es la combinación de dos o más ideologías, una coalición es muy diferente, estamos unidos con un fin determinado en libertad de ideología y nosotros respetamos la libertad de los otros, porque también los otros nos respetan, aquí hay la libertad de pensamiento y la tolerancia».
Al referirse a la ley mordaza, aseguró que «merece cualquier opinión desfavorable de mi parte, estoy en contra de ella y por eso voté en contra».
Dijo que toda ley mordaza va en contra de la sociedad, sobre todo si quiere condicionar a los medios de comunicación, expresó que «ninguna ley de mordaza puede operar en un sistema democrático y menos cuando tiene que ver directamente con coartar a los medios».
PES, PT y Morena, estuvieron de acuerdo en participar en la contienda, manejándose en un marco de respeto para que al final de cuentas los mexicanos voten en un ambiente de absoluta libertad.