martes, mayo 21, 2024

Exfuncionarios duartistas ven lejana su libertad

Xalapa, Ver.

Más de mil días encarcelados en el penal de Pacho Viejo, han cumplido cuatro de los ex funcionarios duartistas, acusados de corrupción, y aunque ya han acumulado tal cantidad de tiempo en prisión, hasta el momento no existe una sentencia en firme en su contra que determine su responsabilidad, pero tampoco existe un panorama alentador para ellos en el sentido de su posible salida de la cárcel.

A días de que se celebre la Navidad y el año nuevo, todo apunta a que Arturo Bermúdez Zurita, María Gina Domínguez Colío, Mauricio Audirac Murillo y Francisco Valencia García pasarán estas festividades en prisión, alejados de sus familias, en situación muy distinta cuando desde el gobierno estatal presumían viajes al extranjero.

En este 2017, ya con Jorge Winckler Ortíz al frente de la Fiscalía General del Estado (FGE), se comenzó a cumplir parcialmente la promesa de campaña de Miguel Ángel Yunes Linares de castigar a los responsables del saqueo de las arcas públicas.

De esta manera cuatro ex funcionarios duartistas están en prisión, dos se encuentran obligados a firmar cada 15 días (Flavino Ríos y Gabriel Deantes); tres más en calidad de prófugos (Leonel Bustos, Nemi Dib y Carlos Aguirre) y otros más que aparentemente consiguieron la impunidad y el perdón como el ex contralor Ricardo García Escalante, el ex oficial mayor de la SEV, Vicente Benítez; y el ex subsecretario de Finanzas y Administración, Juan Manuel del Castillo.

A pesar de los intentos por obtener su libertad por la vía legal o cooperando en investigaciones contra Javier Duarte de Ochoa, su esposa Karime Macías y otros ex compañeros suyos en la administración estatal, ni Arturo Bermúdez ni Mauricio Audirac ni Francisco Valencia ni Gina Domínguez han podido salir de prisión.

Por el contrario, siguen acumulando días en reclusión, y hasta el día de hoy suman de manera conjunta un total de 1,059 días de cárcel. Además se prevé que continuarán entre tres y seis meses más en prisión hasta que finalmente se lleven a cabo sus juicios, en los que se resolverá su inocencia o culpabilidad, por la cual podrían alcanzar sentencias de hasta 10 años de cárcel.

Las oportunidades para salir del penal en Pacho Viejo poco a poco se han ido acabando para los ex funcionarios, pues los jueces federales como los magistrados y jueces locales han fallado en su contra respecto a la ilegalidad de sus detenciones y las resoluciones una y otra vez van confirmando negativas a los ex duartistas. Incluso muchas de las resoluciones en fuero local ayudan a la Fiscalía a subsanar los errores que ha venido cometiendo.

Aunque apenas hace un par de semanas, Bermúdez Zurita consiguió un pequeño triunfo de que le fueran admitidas algunas pruebas a su favor y desechadas unas de la Fiscalía, su futuro no es prometedor y por el contrario continúa recluido. En sus respectivas audiencias los cuatro cercanos ex colaboradores de Javier Duarte de Ochoa no han dudado un sólo momento, incluso desde el primer momento de su detención, en calificarse como inocentes, y en responsabilizar a su ex jefe Javier Duarte de Ochoa como el autor de los desvíos de recursos

Arturo Bermúdez, Mauricio Audirac, Gina Domínguez y Francisco Valencia, quienes no han recibido visitas en prisión de sus ex compañeros de gabinete, han dado a conocer dentro de sus audiencias nombres de otros funcionarios del gabinete duartista como los responsables del desvío de recursos.

Tanto Bermúdez como Audirac, desde el año pasado, comenzaron a colaborar con la Procuraduría General de la República (PGR) y la Auditoría Superior de la Federación (ASF) por los casos de las empresas fantasma y la simulación de reintegros, respectivamente.

Hasta el momento, Arturo Bermúdez ha cumplido 319 días en el penal en Pacho Viejo; Mauricio Audirac, 270 días; Francisco Valencia, 268 días; y Gina Domínguez, 212 días. El 3 de febrero, 29 de marzo, 31 de marzo y 20 de mayo son las fechas en que fueron aprehendidos Arturo Bermúdez, Mauricio Audirac, Francisco Valencia y Gina Domínguez, y en lugar de expresar algún sentimiento de respaldo o encubrimiento hacia su exjefe, lo han responsabilizado de los desvíos en diversas dependencias.

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