El exgobernador de Sonora, Guillermo Padrés Elías, a bordo de una camioneta blanca acompañado por su abogado y rodeado de periodistas, fue escoltado por elementos de la Marina y de la Procuraduría General de la República (PGR) hasta el Reclusorio Oriente de la Ciudad de México, para presentarse ante un juez.

Padrés Elías hizo pública su decisión de acudir ante la autoridad correspondiente para responder a las acusaciones que se le imputan.

Alrededor de las 9:30 ingresó al centro de readaptación social acompañado por su abogado Antonio Lozano Gracia, quien fuera titular de la PGR.

La Secretaría de Marina precisó que sus efectivos sólo brindaron seguridad perimetral. Mientras tanto, la dirigencia nacional del PAN reconoció y calificó como correcta la disposición de Padrés de entregarse a la justicia mexicana, además pidió que Padrés tenga un juicio justo «en el cual se valoren, con toda objetividad, las diversas pruebas presentadas», pidiendo a las autoridades encargadas de impartir justicia a que actúen con «imparcialidad y en estricto apego a derecho».

Al ex mandatario sonorense se le imputan operaciones con el uso de recurso de procedencia ilícita por 8.8 millones de dólares, con dinero que, de acuerdo a las investigaciones, fue obtenido por «sobornos» para conceder a un amigo suyo, contratos dedicados a la manufactura de uniformes escolares.

Las investigaciones indican que realizó transacciones bancarias a través de Dolphinius C.V., compañía del ramo papelero creada en Holanda, a la cual transfirieron fuertes sumas de dinero en 2014, además las investigaciones realizadas por la Contraloría General del Estado de Sonora, argumentan que durante su sexenio de Padrés, existió un desfalco al erario público superior a 30 mil millones de pesos.