Ciudad de México.-El Gobierno federal presentará el presupuesto 2017 ante el Congreso, la mayor parte de los indicadores destacan la precariedad en la que se encuentra la economía nacional, mientras que las expectativas planteadas al inicio de la administración del Presidente Enrique Peña Nieto con las reformas estructurales se han desvanecido, coinciden analistas, informes y cifras del propio Gobierno.
El Centro de Estudios Económicos del Sector Privado (CEESP) informó que para estabilizar las finanzas públicas y mantener constante la relación deuda a Producto Interno Bruto (PIB), se requiere un superávit primario cercano a 300 mil millones de pesos para 2017.
El organismo del sector privado consideró, que el sector público requiere un esfuerzo mayor al planteado por el gobierno en los Precriterios 2017, en donde se planteó el objetivo de lograr un superávit primario de 40 mil millones de pesos, equivalentes a 0.2 por ciento del PIB.
Luis Videgaray anunció que el paquete económico 2017 apuesta por un balance primario superavitario, por lo que frenará la dinámica de endeudamiento, pero además, no incluirá ni aumento ni nuevos de impuestos, y contendrá un grupo de al menos seis reformas para incentivar la actividad empresarial, la inversión y el ahorro.
El Presidente el mes pasado recriminó a los medios que en las noticias se dejan de lado los “esfuerzos” de su Gobierno y se da sólo la información negativa, pero la visita de Donald Trump y los últimos reportes de Hacienda, el Inegi, Banco de México (Banxico), Standard and Poo’rs y Moody’s, colocan al país de nuevo en el ojo crítico.