domingo, mayo 19, 2024

Crónicas de mi pueblo

65º Aniversario de la Consagración del Templo de Catedral

El majestuoso templo de nuestra Catedral, perteneciente a la Diócesis de San Andrés Tuxtla, tardó 80 años en construirse y, se encuentra ubicado, en el primer cuadro de la cuidad, en el barrio de San Andrés, al Sureste del Edo. de Veracruz; sus límites eclesiásticos son: Al Norte con el Golfo de México, al Sur colinda con la Prelatura de los Mixes y la Diócesis de Tehuantepec y Tuxtla Gutiérrez, al oriente con el Golfo de México y la Diócesis de Tabasco y, al Occidente con la Diócesis de Veracruz.

Su territorio es uno de los más pródigos de la República Mexicana.

En la segunda mitad del siglo XIX, nuestro piadoso pueblo de San Andrés, construyó una capilla de madera en honor a San José, a la que prendieron fuego las huestes Porfiristas, capitaneados por el General Mariano Lazcano; en 1870 se inicia la construcción del actual templo, gracias al entusiasmo de  un grupo de católicos encabezados por Don José María Ovando y, secundados por Don Bonifacio Solana y Don Manuel Palacios, quienes encabezaron juntas con los pobladores, motivándolos a participar en la edificación del templo, logrando la construcción de los cimientos,  guiados por el plano que diseñara el Arquitecto Italiano Mateo Zápare, mismos que ya no serían presa fácil del fuego.

En el ábside, se colocó la primera piedra que bendijo el Padre Carvajal y, al mismo tiempo se puso en la parte de atrás, en donde ahora se encuentra el Altar Mayor, un cofrecito de metal con alhajas obsequiadas por generosas damas del pueblo, mismo que fue cerrado y soldado en presencia de todos, la madrina fue la niña Anita Solana, quien sostuvo en sus manos dicho cofre durante toda la ceremonia. El 2 de febrero de 1871 se comenzó la construcción de la torre del Reloj y se terminó el 29 de mayo de 1886, la obra fue dirigida por Ramón Navarrete, se inauguró el 15 de Septiembre de 1888. El encargado de dar mantenimiento al reloj de Catedral fue por muchos años, a principios del siglo XX, el Sr. Bonifacio Rojas Castillo, posteriormente dicha actividad la desempeñó su hijo el Sr. José Rojas Pérez, de mediados del siglo XX hasta 1985, año en que falleció; actualmente dicho servicio lo realiza el Sr. José de Jesús Rojas Mauleón, nieto de Don Bonifacio; cabe señalar que el primer reloj era mecánico, el actual es electromecánico( suizo); el encargado de darle cuerda al reloj público cada 10 o 15 días, desde 1942, era Don Adolfo Constantino Rodríguez, posteriormente estando más grande Don Adolfo, su hijo Manuel Constantino Baxin se encargaba de darle cuerda el reloj.

En 1890, proveniente de Pánuco, Ver., de donde era originario llegó el Pbro. Ramón Domínguez Alejandrit y, de inmediato se enamoró del proyecto y en forma por demás entusiasta, organizó los comités pro-construcción de la Catedral, nombrando a Nicolás Maldonado y a Epifanía Figueroa, encargados de uno de dichos comités, ya que habían destacado por su constancia y tenacidad; otro comité, estuvo a cargo de las Sras. Elena Elías de Solana, Amalia Carrere de Ibarra, Elena Menéndez de Pérez y Rosario Moreno.

1906- El Pbro. Beltrán inicia la capilla dedicada a San José y la Purísima Concepción, dentro del casco de la construcción de la Catedral y ese mismo año, se inicia la construcción de las primeras escalinatas que tuvo la capilla, ya que fue edificada en una loma, por el albañil José Canseco originario de Huatusco, Veracruz; al año siguiente, a finales de 1907, se termina de construir la austera Capilla de madera y tejas; al llegar el  Pbro. Ángel Sánchez, como responsable de la misma en 1909, se avoca  a la construcción del atrio y las escalinatas que permanecieron hasta la década de los 60s, fecha en que fue modificada, tal como la conocemos actualmente.

En 1925, el Presbítero Capellán y Vicario Pedro Castillo, promueve la construcción de cuatro columnas del interior del templo,  de lo que hoy es Catedral y, obsequia una escultura de la Imagen de la Inmaculada Concepción; por su parte la señorita Conchita Sedas Champion funda la Congregación Mariana de la Inmaculada Concepción, misma que permaneció vigente hasta su muerte. En 1929, llega a San Andrés como una bendición el Pbro. Gregorio Aguilar y Gómez, procedente de la ciudad de México y se entusiasma con el proyecto, logrando ese mismo año, que el Sr. Obispo Jesús Villarreal y Fierro le autorizara, la formación de un patronato pro-construcción del templo de Catedral, el cual quedó integrado por las siguientes personas: Don Elías Rodríguez, Don Felipe del Corte, Don Adolfo González y por las damas Sritas. Concepción Sedas Champion, Eugenia Pérez Turrent. y Doña Ma. Fernández del Corte. Por un lapso de casi 10 años se volvió a paralizar la obra de construcción debido a la depresión económica mundial y al anticlericalismo, fue hasta 1939 cuando como siempre la entusiasta Srita. Concepción Sedas Champion y sus dos hermanas Margarita y Ernestina, apoyadas por grupos de damas inician colectas, organizan kermeses, obras de teatro y cualquier otra actividad que pudiera rendir fondos. Sus colaboradoras más cercanas lo fueron las Sritas. Graciela Cabada y Hermila Solana de grata memoria para nuestro pueblo, entre otras.

Las naves centrales se terminaron en 1947 y, desaparece la capilla de madera que por 40 años dió servicio a la feligresía.

Al año siguiente el 25 de Septiembre de 1948, en San Mateo Osteotitlán Edo. De México, se funden las campanas destinadas a la Catedral, siendo el fundidor el Maestro Rafael Gómez Tagle, testigos de hechos fueron las Sritas. Concepción y Margarita Sedas Champion, Lucia Carrere G., Sra. Socorro Miravete de Van Hasell, las hermanas Elda y Hermila Solana, y el Sr. Pompeyo Figueroa Mortera, quienes  fungieron como padrinos.

La torre del reloj se mandó retocar y se igualó a la del campanario, bajo la dirección del Maestro Tlahuixtla, lo cual se comprueba en existencia del documento enterrado al pie de la torre del Reloj, el cual en su original, depositado en la base del pararrayos, se menciona la muerte del señor José María Obando, “Quien no pudo ver premiado sus afanes, de ver concluida la obra”. También se hace mención del señor Gabriel C. Artigas “como señor obrero”. Este acto fue apadrinado por los señores Rafael Lara A. y Marcelino González y Fernández, jefe Político del Cantón. El documento citado dice en uno de sus párrafos lo siguiente: nosotros decimos, desde lo alto de esta torre, cien generaciones bendigan a los que aman el progreso y adelanto de los pueblos, salud, generaciones que nos sucedan, si las que vienen pueden dirigirse a los presentes, estas veneran a las pasadas y, saludan a las que vendrán, que el gran arquitecto del universo conserve eternamente este edificio y que, derrame sobre este pueblo la prosperidad y bienestar…

En 1948 estando como Presidenta del Comité Pro-Construcción la dinámica y muy apreciada Conchita Sedas Champion, contando con el asesoramiento del inolvidable Mons. Gregorio Aguilar y Gómez y, con la participación del pueblo Sanandresino, los trabajos se aceleraron y en Enero de 1948 se colocó la cruz de la última torre construida y, en 1949, Mons. Gregorio Aguilar y Gómez bendice las campanas que fueron colocadas con gran algarabía; finalmente el 7 de enero de 1950, las campanas repicaron a fiesta, las calles se adornaron, vistosos carros alegóricos con motivos  religiosos arrancaban gritos de alegría de las multitudes y, en el recinto sagrado con toda solemnidad, se llevó a cabo la consagración por Mons. Jesús Villarreal y Fierro, estando presente el Sr. Arzobispo de México, Don Luis María Martínez, el delegado apostólico Dr. Luigi Raymondi y, el Archipreste de la Insigne Basílica de Guadalupe, Mons. Gregorio Aguilar y Gómez, además de varios prelados y, decenas de sacerdotes, mientras tanto, el coro de la Basílica de Guadalupe irrumpía con angelicales melodías; cabe aclarar que en la construcción de esta magna obra, se contó con la gran ayuda moral y material del muy querido y recordado Mons. Gregorio Aguilar y Gómez, quien por su gran amor a Dios y al pueblo de San Andrés Tuxtla, al haberse detenido la obra por falta de dinero, vendió unas propiedades que había heredado, para terminar de construir el templo; así mismo es digno de reconocer el coraje y arrojo de nuestro pueblo, el cual con entusiasmo participó en las actividades para recaudar fondos económicos, realizando rifas, vendimias, kermeses y faenas dominicales, en las cuales acarreaban piedras de los arroyos  del pueblo o donaban lo que estaba a su alcance, quedando demostrado que la unión hace la fuerza y que cuando se quiere, se puede.

Documento Oficial en latín de la Consagracion de Catedral, firmada por el Ilmo. Sr. Jesús Villarreal y Fiero, Primer Obispo de San Andrés Tuxtla.

Traducción del acta de consagración

En el año del señor de 1950 el día 7 de Enero, yo Jesús Villareal y Fierro, Obispo de Tehuantepec, consagré la iglesia y el altar en honor de la Inmaculada Concepción de la Santísima Virgen María y, de su santo esposo el Patriarca José y de San Andrés Apóstol y, coloqué en el sepulcro del Altar, las reliquias del Santo  Mártir Adeodato, de San Gregorio Magno, doctor de la Iglesia y de las Santas Rosa de Lima y Rosalía. Concedí a todos los fieles que visiten este templo este día y, el día del aniversario obtengas 40 días de verdadera indulgencia según lo acostumbrado en la iglesia.

En noviembre de 1958, Mons. Jesús Villareal y Fierro celebró sus bodas de oro sacerdotales y, sus bodas de Plata Episcopales, Mons. Raimondi, delegado apostólico vino a felicitarlo a nombre del Papa y, seis meses más tarde la Santa Sede tomando en cuenta los informes presentados por el Sr.  Delegado, sobre la avanzada edad y problemas de salud de Mons. Villarreal y Fierro, nombra Obispo Coadjutor en Abril de 1960 a, Mons. Arturo Szymansky Ramírez, quien naciera el 17 de Enero de 1922, en la ciudad de Tampico, Tamaulipas; en 1963 Monseñor Villareal fue a pasar una temporada a su tierra natal por las razones referidas anteriormente y el 19 de febrero de 1965, fallece en la ciudad de Durango, Durango, quien fuera el Primer Obispo de San Andrés Tuxtla.

El 21 de Junio de 1960  Mons. Arturo Szymansky Ramírez, es consagrado obispo de la tierra que lo vio nacer y, el 26 de junio era recibido por los Sanandresinos, como el 2º Obispo de nuestro pueblo. La labor pastoral de Mons. Szymansky como obispo fue muy fecunda, le abrió las puertas a muchos Institutos Religiosos que gustosamente accedieron a su llamado, promovió más de cien misiones y, en su época cobraron fuerza los Cursillos de Cristiandad y el Movimiento Familiar Cristiano, incrementó y fomentó la promoción de las cajas populares de ahorro y préstamos con muy bajo porcentaje de interés, entre los feligreses más menesterosos, como la “Caja Popular Montini”; impulsó los Colegios Particulares, le tocó participar en el Concilio Vaticano II, promovió e impulsó las innovaciones litúrgicas dándoles su justa interpretación y sentido, explicó a la grey católica el nuevo enfoque de la teología evangelizadora, la cual cobró más bríos.

El 13 de Agosto de 1968 mientras participaba en la primera conferencia del CELAM en Colombia, por una desafortunada determinación de su parte, ante una de las tradiciones más antiguas de nuestro pueblo, de religiosidad popular, recibió la noticia de haber sido transferido a Tampico, su tierra natal, donde tomó posesión como Obispo el 11 de Octubre del mismo año. Durante 6 meses quedó vacante la diócesis y el colegio de consultores, reunido como lo marca el derecho canónico, eligió como Vicario Capitular al Ilmo. Mons. Víctor Phillips García, quien con mano suave, dado el ambiente tenso de confusión que existía entre los católicos, guió la diócesis de Octubre de 1968 hasta el 21 de marzo de 1969, fecha en que llegó a nuestro pueblo el Excmo. Sr. Obispo Don Guillermo Ranzahuer González, hombre de mente aguda, temperamento calmado, reflexivo y con capacidad para penetrar en los problemas por más serios que fueran. Originario de Huatusco, Veracruz, donde nació el 12 de marzo de 1928, con él, llegó a nuestra diócesis una nueva esperanza de reconciliación y encausamiento del orden religioso; en un evento sin precedentes en la historia de nuestra ciudad, como las 18:00 horas del día 21 de marzo de 1969, cuando ante la impaciente multitud provenientes de todas las latitudes del estado que, se hallaban reunidas  a los lados de la Carretera Federal, desde la entrada a San Andrés, por donde se encuentra la UGM, hasta Catedral, apareció la larga caravana de vehículos que habían partido a temprana hora de Huatusco, para acompañar al nuevo Príncipe de la Iglesia, que el día 15 de febrero de 1969, había sido nombrado Obispo por su Santidad Paulo VI en la ciudad de Roma; en el pueblo había un regocijo total, las tranquilas calles de otros tiempos, hervían de personas y las campanas de Catedral contagiaban el ambiente con su sonoro repicar, anunciando la entrada de la comitiva al recinto sagrado. Ante la presencia de los señores Obispos de las Diócesis cercanas, el  venerable clero,  y representantes de todas las parroquias, el Excmo. Sr. Delegado Apostólico Don Guido del Mistri, presentaba y daba posesión canóniga a Mons. Guillermo Ranzahuer González, con todas las prerrogativas del rito católico para estos casos, como 3º Obispo de nuestra ciudad. Al día siguiente, por la mañana en solemne misa recibió la Consagración Episcopal de manos del Excmo. Sr. Arzobispo de Xalapa, Don Emilio Abascal Salmerón. Durante 35 años que estuvo entre nosotros, su trabajo pastoral fue de marcada prudencia, hablaba poco y oía mucho; durante su período como Obispo de la Diócesis, dinamizó la promoción vocacional, siempre en la línea de la Evangelización; dió muchas garantías a los Institutos Religiosos, promovió los ministerios laicos, culminando con la existencia de los diáconos casados, aunque la principal preocupación de Monseñor Ranzahuer era la Evangelización, nunca dejó de animar, e inclusive ayudar económicamente  en la construcción de templos y capillas. Logró la división de la diócesis después de un estudio profundo en la zona industrial de Coatzacoalcos, en 1984. La creación del Seminario Mayor San José, ubicado en la comunidad del Salto de Eyipantla.

Muere Mons. Guillermo Ranzahuer González el 5 de Agosto del 2008 en la ciudad de México, mientras impartía una cátedra en el Seminario de Texcoco, en Estado de México, sus restos descansan en el Sagrario del templo de Catedral, de donde fuera Obispo; cabe aclarar que siendo Obispo Emérito de nuestra Diócesis, el Sr. Ranzahuer, habiendo cumplido el período establecido para el desempeño de sus Funciones Ministeriales y, por razones de salud, la Santa Sede nombra Obispo Titular de Catedral a Mons. José Trinidad Zapata Ortiz, quien nació el 24 de Mayo de 1959 en San Vicente de Plenitud, Fresnillo Zacatecas y, fuera nombrado 4º Obispo de nuestra Diócesis, por su Santidad Juan Pablo II; la noticia llenó de alegría a toda la grey católica y, en un evento sin precedentes, fue Consagrado Obispo de la Diócesis de San Andrés Tuxtla, el 31 de julio del 2004, en la Cuidad de Catemaco. Con personalidad sencilla y trato amable, Mons. Trinidad en el poco tiempo que duró al frente de la Diócesis, supo  ganarse el respeto y cariño del gremio Sacerdotal, al cual guió como buen pastor, con mano firme y espíritu humilde, promoviendo la Evangelización en todo momento, para suscitar discípulos misioneros que dieran testimonio con sus vidas del Reino de Dios, así también a la feligresía, que integró el rebaño a su cargo en toda la Diócesis. Le acompañaron en esta hermosa pero muy delicada tarea espiritual en el templo de Catedral, el Párroco Pbro. José Martínez Mata y el Vicario Pbro. Héctor Javier Flores Flores, así como el  Sacristán Francisco Toto Pío, los Ministros, Acólitos y las Organizaciones  Religiosas; contó  además con un equipo humano esparcido en toda la Diócesis integrado por 106 sacerdotes, 11 Diáconos Transitorio, 2 Pbros. Misioneros, 33 Diáconos Permanentes, y en la foranías Jaltipan con 7 parroquias y 1 Diaconía; foranía Sayula 11 parroquias; foranía Isla 10 parroquias, 2 cuasi parroquias, 1 zona pastoral y una Diaconía; foranía Santiago 7 parroquias 1 cuasi parroquia; foranía Catemaco 7 parroquias 1 diaconía; foranía San Andrés 8 parroquias, 1 Diaconía, un Seminario Menor a nivel preparatoria en la ciudad de Santiago Tuxtla con 28 alumnos; un Seminario Mayor Diocesano con 16 alumnos de Propedéutico, 22 alumnos de filosofía, 1 en 3º de Teología y 2 seminaristas en Servicio Pastoral; en total 83 seminaristas  diocesanos; 3 Monasterios Femeninos, 3 Colegios Religiosos, 8 Institutos Misioneros y 2 Institutos Masculinos y los siguientes Movimientos Religiosos Seglares: Catecúmenos, Movimiento Familiar Cristiano, Pastoral Familiar, Pastoral de la Salud, Pastoral Penitenciaria, Adoración Perpetua, Pastoral Juvenil, UFCM cuyo Presidenta es la Profra. Concepción Magaña de Moreno. Todos ellos integraron junto con el Exmo. Mons. José Trinidad Zapata Ortiz, los obreros de la Mies de Dios, al servicio de nuestra diócesis, de la cual nuestro hermoso templo de Catedral es el centro material, de la “Gran Obra Espiritual” que de ella emana. El templo fue remozando en su totalidad gracias a la iniciativa del Reverendo Pbro. José Martínez Mata, párroco de la Parroquia del Sagrario; entre los arreglos que realizó el Padre Mata, como cariñosamente le llamaban sus feligreses está: la colocación de talavera en las cúpulas y el pintado total del templo, mandó hacer dos campanas que estaban rotas, las cuales fueron fabricadas por el Sr. Carlos Vera, originario del Edo. de Hidalgo, el trabajo de elaboración se llevó a cabo en el Seminario Mayor, ubicado en El Salto de Eyipantla; promovió la compra de un nuevo órgano melódico y sonido para el templo, así como el arreglo de la Pila Bautismal; en el Presbiterio se colocó la Sede o Cátedra, el Ambón, las bases de los cirios y floreros,  de cantera rosa; mandó construir más bancas de cedro para el templo, se terminaron los salones Juan Pablo II y Benedicto XVI y la capilla Guillermo Ranzahuer, se construyó una funcional cocina comedor, para las vendimias que realizan los grupos de apostolado, los domingos y, se construyeron nuevos baños, para el público católico; todo esto con la generosa ayuda de la grey católica y el visto bueno del  Ilmo. Sr. Obispo. El 10 de Marzo del 2014, el  Sr. Don Trinidad Zapata Ortiz, 4º Obispo de San Andrés Tuxtla, recibe la noticia del Vaticano que sería removido a la Diócesis de Papantla; el día 20 del mismo mes, se publica su cambio a todo el mundo, a través del Observatorio Romano; al mismo tiempo el señor Obispo, conforme al Canon 418, parágrafo 2, No.1, Mons. Zapata quedaba constituido en Administrador Diocesano; el pueblo católico se consternó, en todos los medios sociales, políticos y culturales de la ciudad, hubo conmoción; dada la gran estimación y el trabajo apostólico que desempeñó el Sr. Obispo, aunado a su sencillez y don de gentes que le caracterizan, fue objeto de muchas muestras de afecto y, despedidas. El día 11 de Junio del 2014, a las 12:00 horas quedó constituido como 10º Obispo de la Diócesis de Papantla, con sede en Teziutlán, Puebla. Por muchos meses nuestra Diócesis quedó acéfala y, es nombrado administrador diocesano, el Pbro. Salvador Arévalo Barajas; en todas las misas se hacían oraciones especiales, rogando a Dios iluminará a S.S. Francisco 1º, para que pronto llegara el 5º Obispo a la Diócesis de San Andrés.

Después de casi un año de espera, por fin, el 19 de Mayo del 2015, llega a nuestra diócesis Mons. Fidencio López Meza; nacido el 28 de Abril de 1950, en la comunidad de la Estancia, de la Parroquia del Capulín de San José de Iturbide Guanajuato. Una vez conocida la noticia de su nombramiento, el pueblo católico se llenó de júbilo, despertó alegría y expectación, a la vez en el pueblo de Dios y, en los agentes de pastoral, laicos, consagrados, diáconos y presbíteros.

El recibimiento fue apoteótico, miles de  feligreses se congregaron desde la entrada de la ciudad hasta Catedral, para dar la bienvenida al 5º Obispo de la Diócesis; bandas de guerra y filarmónicas, banderitas con los colores del vaticano, bastoneras de colegios religiosos, globos, pasa calles, flores, cantos, corredizos y una gran algarabía, así como los repiques de campana, anunciando la llegada del nuevo jerarca de la Diócesis de San Andrés; un programa especial se llevó a cabo en su honor, en un estrado ubicado en el frente del templo, ahí, el Alcalde del Pueblo, Ing. Manuel Rosendo Pelayo, le dió la bienvenida y, el Delegado Apostólico Christoph Pierre, lo presentó como el nuevo obispo de la diócesis. El día 20 de Mayo ante católicos venidos de todas las latitudes, Obispos, sacerdotes, religiosas, seminaristas, laicos y el pueblo de Dios, Mons. Fidencio López Plaza, fue ordenado Obispo por el Delegado Apostólico Christoph Pierre, en la ciudad de Catemaco.

Bienvenido Mons. Fidencio López Plaza, a la Diócesis de San Andrés, que peregrina en las montañas de Los Tuxtlas y, sierra de Santa Marta, así como en las llanuras de Sotavento, regada por las cálidas aguas del Golfo de México y, por los poderosos ríos Papaloapan, San Juan, Tesechoacán y Coatzacoalcos, lo reciben con entusiasmo. Enhorabuena.

Por mi parte es todo, les deseo que tengan una semana feliz y que Dios los bendiga abundantemente.

Profr. Sixto Carvajal

Cronista de San Andrés Tuxtla.

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