El incremento salarial de 30% decretado por el presidente de Venezuela, Nicolás Maduro, y que entró en vigencia este 1º de mayo, favorece de manera directa a 5 millones 573 mil 261 trabajadores del país, destacó este lunes el vicepresidente de Planificación, Ricardo Menéndez.
Indicó que la modificación de la base de cálculo de cesta ticket de 2,5 a 3,5 Unidades Tributarias (UT) para aumentar el bono de alimentación de 13.275 bolívares a 18.585 bolívares, tiene un impacto sobre 12 millones 126 mil 147 trabajadores.
«Esto es un dato importante porque se empieza a vislumbrar medidas de amplio impacto, desde el punto de vista social», recalcó Menéndez en rueda de prensa, transmitida por Venezolana de Televisión
El también ministro para la Planificación señaló durante el transcurso de 2016 que el salario mínimo integral en Venezuela presenta un incremento acumulado de 105%.Eso significa que, al sumar el salario mínimo mensual (Bs 15.051) y el cesta ticket (Bs 18.585), el ingreso mínimo integral de los venezolanos asciende de 24.853 bolívares a un monto de 33.636 bolívares.
Menéndez destacó que a pesar de la guerra económica que la derecha ha mantenido por casi 3 años en contra de los venezolanos, y la disminución que han experimentado los ingresos a la nación por la baja en el precio del crudo en el mercado internacional, el Gobierno Nacional garantiza la protección de un salario justo para que el pueblo, y en especial los sectores más susceptibles, puedan acceder a los productos y servicios que requieren.
«Esto es importante, porque denota una conducta conceptual desde el punto de vista de la Revolución Bolivariana y es precisamente la defensa del trabajador. Esto no es cualquier tema. Estamos viviendo una guerra económica pero, adicionalmente, la intención de un sector de la sociedad de propugnar un golpe económico y detrás de ese golpe económico una inestabilidad desde el punto de vista político en nuestro país», dijo.
Actualmente más del 70% de la población venezolana percibe entre uno y tres salarios mínimos.
El vicepresidente de Planificación explicó que los ingresos del 50% de la población están entre uno y dos salarios, mientras que el otros 20% gana entre dos y tres salarios, lo que «permite, precisamente, ir modificando los niveles desde el punto de vista de la distribución de los ingresos».
Además, indicó que población que tiene ingresos por encima de tres salarios mínimos también es impactada de manera positiva con los incrementos del bono de alimentación, porque «equivale prácticamente a un aumento general de salario; ya que el ticket de alimentación se corresponde con toda la base poblacional».