Muchos agravios a la población

Por: Luis Velázquez

Javier Duarte, JD, está con un grillete y hasta con ancla en Veracruz. Y la campaña del precandidato priista a la mini/gubernatura, en el limbo, sin levantar. Y aun cuando el repudio popular al duartismo anuncia la debacle tricolor en las urnas, los demasiados agravios anuncian una tempestad electoral.

El ciudadano quiere sangre en el coliseo. Y la sangre significa la caída de JD. Mínimo, la renuncia del secretario de Seguridad Pública y/o la del Fiscal.

Y aun cuando el martes 23 fue uno de los peores días sexenales para JD (la faena periodística de la ciudad de México, la denuncia del Auditor Superior de la Federación, ASF, la declaración de Manlio Fabio Beltrones en Tabasco y el abucheo en el café “La Parroquia”, entre otras cositas), igual que el dinosaurio de Tito Monterroso, JD siguió ahí.

Pero en el fondo subyace la misma inquietud. Por ejemplo:

¿Cómo, de qué manera, subsanar tantos agravios en contra de la población electoral, los padres que han perdido a sus hijos, las mujeres secuestradas y desaparecidas, los empresarios quebrados, los pensionados apaleados, las irregularidades millonarias denunciadas por la ASF, los alcaldes estafados con las participaciones federales, la corrupción política, entre otros?

Si, por ejemplo, se habla de una deuda pública de más de cien mil millones de pesos, ¿cómo será cubierto tal pendiente, toda vez que el gravamen a las participaciones federales tiene ya un tope establecido, incluso, por la secretaría de Hacienda y Crédito Público?

¿Cómo desagraviar a los familiares de los desaparecidos, 1,200 aprox., de los cuales 144 son menores, si a pesar de tantas denuncias y movilidad social, la impunidad sigue predominando?

Y más porque rayando la peor hipótesis, nadie puede devolver con vida a un familiar muerto.

¿Cómo, entonces, curar tantas heridas, tanto dolor, tanto sufrimiento por el hijo secuestrado y desaparecido y asesinado y sepultado en una fosa clandestina?

DEMASIADOS AGRAVIOS EN EL CORAZÓN SOCIAL

Más aún:

¿Cómo desagraviar a tanto empresario, comerciante, pequeño, mediano, grande, que han cerrado sus changarros porque Javier Duarte los ha empinado atrasando tanto tiempo el pago de los servicios prestados?

¿Cómo desagraviar a todos los que han perdido su empresa?

¿Cómo desagraviar a los pensionados apaleados y a los estudiantes madreados en la madrugada xalapeña y a los profesores golpeados en otra madrugada y a los indígenas bloqueados en su legítima protesta social reclamando el cumplimiento de la obra pública ofrecida?

¿Cómo desagraviar a la Universidad Veracruzana por el regateo en el pago del subsidio estatal y federal, y de paso, las tomaduras de pelo?

¿Cómo desagraviar a los ciudadanos dolientes de quienes el mismo gobernador se ha pitorreado, porque es un político bipolar, indolente, despreciativo, rencoroso y vengativo?

Pero además, soberbio y valemadrista.

Por eso, incluso, y por la tranquilidad de Javier Duarte, y ante tantos agravios a la población electoral, lo mejor que puede hacer es renunciar por voluntad propia al mandato constitucional.

Y renunciar antes de que el Yunes rojo y/o el azul ganen en las urnas, y toda vez que cada uno ha ofrecido la cárcel para los políticos pillos y ladrones, pero además, de que todos devuelvan el dinero robado, cumplan al pie de la letra, sin rajarse ni echarse para atrás, la palabra empeñada.

Cierto, cierto, cierto, el presidente del CDE del PRI, Felipe Amadeo Flores Espinoza, “ha tirado la espada en prenda” y dice que él, nunca, jamás, ha escuchado el repudio popular a Javier Duarte.

¡Pobrecito presidente, además de autista político, mentiroso!

Y más porque hasta los mismos priistas se avergüenzan de JD.

Basta y sobra con leer los desplegados periodísticos, escuchar el grito callejero de los pensionados en “La parroquia” jarocha, o mirar a la persona que antier se crucificó frente a la SEFIPLAN.

Se ignora si Amadreo está buscando con su halago a JD una notaría más y un cargo público más para otro de sus hijos y/o para un sobrino y/o para él mismo.

Pero, bueno, con tal declaración, mucho, demasiado, excesivo daño político y social provoca para el Yunes rojo.

Queda bien con JD, a quien le renunciara como procurador de Justicia, pero evidencia al Yunes rojo.

DE CUALQUIER MANERA, DUARTE YA ESTÁ RENUNCIADO…

Los grilletes han llegado a lo siguiente:

Por un lado, JD tiene cerrada la llave al Yunes rojo.

Por el otro, el Yunes rojo organiza comelitonas con empresarios para una mochada, incluso, sin resultados, porque muchos argumentan que el duartismo los quebró.

Además, hay tantos agravios a la población que el Yunes rojo arrastra una camisa de fuerza que de alguna forma lo ha atado hasta ahora, aún cuando en el penúltimo discurso ya habló de encarcelar a Javier Duarte, pues solo así levantaría.

Es más, solo amarraría su triunfo en las urnas con la caída de Duarte y/o de Bermúdez y Bravo Contreras.

Tal cual, el senador Pepe Yunes Zorrilla actuó con mucha prudencia y sabiduría al declinar por Héctor Yunes y esperar el año 2018, siempre y cuando los vientos sean favorables, porque si el Yunes azul gana la mini, entonces, sus dos hijos, Miguel Ángel y Fernando, levantarían la mano para recibir el trono imperial y faraónico por seis años de manos de su padre.

Pero, bueno, a estas alturas, JD está tan evidenciado que Los Pinos lo renuncian, o de lo contrario, el rumor lo terminará de descarrilar según refiere el politólogo Carlos Ronzón Verónica.