Por: Luis Velázquez
•El gran cronista de EU
•Sórdido retrato de un país
•El actor Clint Eawstwood
EMBARCADERO: Clint Eawstwood, 84 años, está considerado en el cine la versión norteamericana de los hermanos Almada… El actor rudo, el artista de rostro patibulario, pero al mismo tiempo, el gran cronista de Norteamérica… El escritor Norman Mailer, uno de los grandes activistas sociales, dice que “jamás existió otro norteamericano igual”, pues sus películas son el retrato puntual de una nación, por un lado, la primera potencia del mundo, y por el otro, el país de la desigualdad social y económica, educativa y de salud, la criminalidad y “las políticas de mano dura policiacal” y las guerras, como describe el reportero Marc Bassets en un relato en el periódico “El País”… Eawstwood fue alcalde en su pueblo, Carmel, en el estado de California, y el edil actual, Jason Burnett, le suele pedir consejo, y se los da, a diferencia de Miguel Alemán Velasco, uno de los mexicanos más conocidos en el planeta, quien siempre alardea de que nunca da consejos, porque “los inteligentes no los necesitan y los pendejos no hacen caso”… En las películas de Eawstwood (también es director), predominan las malas calles en ciudades degradadas por la violencia y el crimen… Incluso, el actor tiene su productora, de nombre Malpaso Road, en el pueblo, de tal forma que ahí mismo suele desarrollar algunos de sus filmes, una zona “de acantilados y bosques que fue santuario de beatniks y hippies en los años cincuenta y sesenta”… Sus películas son un resumen de lo que Estados Unidos ha sido y es, y por eso mismo, Mailer, el gran reportero, lo califica como el cronista número uno de la vida norteamericana, el país más poderoso del globo terráqueo, elegido por Osama Bin Landen para su venganza musulmana con las Torres Gemelas y en donde fueron asesinados John F. y Robert Kennedy, cuando ambos eran candidatos presidenciales…
ROMPEOLAS: Entre sus películas más famosas están “Harry el Sucio”, donde describe la criminalidad y las políticas policiacas de mano dura… “Gran Torino”, la historia de un obrero, que además es viudo y jubilado, “que ve cómo su barrio de toda la vida se llena de inmigrantes asiáticos” y que relata la historia de un Estados Unidos poblado y enaltecido con la migración de todo el mundo, entre ellos, latinoamericanos, donde los mexicanos son los más puntuales… Una de sus últimas películas es “El francotirador”, que versa sobre los veteranos de la guerra, medio millón de ex combatientes que después de la guerra de Vietnam, declarado por Richard Nixon (un tema abordado también por Norman Mailer), y también de las guerras de EU en Irak y Afganistán, regresan a Estados Unidos atrapados y sin salida en un trauma sicológico, siquiátrico y neurológico… Dice Eastwood: “Me atrajo el personaje, era una persona interesante y tenía una vida interesante”… Pero más allá de tal curiosidad humana, el filma versa sobre el impacto de los veteranos en la vida cotidiana… Según el intelectual palestino, Edward Said, Clint Eastwood está considerado uno de los cuatro clásicos vivos del cine norteamericano, a saber, Steven Spielberg, Francis Ford Coppola, Martín Scorsese y Woody Allen… Una de sus frases claves, que ha sido eje central de su vida, es la siguiente… “No hay ningún plan en la vida y muchas cosas dependen de las circunstancias”… También ha acuñado la siguiente frase bíblica… “Uno de los dilemas de la humanidad es que está destinado a luchar siempre”… Tal cual, el pintor David Alfaro Siqueiros, uno de los 3 grandes muralistas de México junto con Diego Rivera y José Clemente Orozco, decía que “la vida sin problemas se vuelve insípida”…
ASTILLEROS: Eastwood significa en el cine lo que Norman Mailer, Truman Capote, John Doss Passos, William Faulkner, John Reed, Scott Fitzgerald y Ernest Hemingway en la literatura y el periodismo… Y más si se considera que la literatura presta al cine recursos narrativos y descriptivos de igual manera como el cine a la literatura… Y más ahora cuando la última moda de la literatura y el cine en todas partes del mundo es el texto documental, basado en la realidad estrujante… Incluso, alguna vez, visionarios, Gabriel García Márquez y Carlos Fuentes Macías, dijeron que sopesaban tirar sus libros al mar, porque la realidad supera y rebasa a la ficción… Tal cual es la temática central de Eastwood, quien es hijo de la Gran Depresión norteamericana, tiempo aquel cuando sus padres, pobres, viajaban, como tantos otros, de pueblo en pueblo de California buscando modestos y sencillos trabajos para sobrevivir… “En aquel momento, dice el artista y director cinematográfico, no lo entendía, pero así sí: vi luchando a mis padres para llegar a fin de mes… Hubo un tiempo, en los años treinta, en que no había guerra: la guerra consistía en sobrevivir a una economía horrible en una época en la que no existía un Estado de Bienestar. Cuando te arruinabas te arruinabas”… Y, bueno, y por cierto, en aquellos años, el papá de los Kennedy sobrevivió, pero además, construyó su fortuna, traficando con alcohol, que estaba prohibido, como fue cronicado en la película “Leyendas de pasión”, con Brad Pitt y Anthony Hopkins, tiempo aquel de la primera guerra mundial…