Ciudad De México.- El ex gobernador de Coahuila, Humberto Moreira, afirmó que seguirá en la política, aunque aún no define qué puesto público buscará.
«Lo de la política en definitiva sí, yo sigo en la vida política, tengo 49 años y además yo me baso mucho en lo que son las encuestas y en mi tierra las encuestas, las diferentes mediciones que hemos hecho me ubican en mi tierra en un sitio que me permite poder mantener el ánimo de participar en política.
En Saltillo «he sido alcalde y gobernador, pero nunca he sido regidor, nunca he sido síndico, nunca he sido diputado local, nunca he sido diputado federal, nunca he sido senador y además en el caso de la alcaldía, ahora hay reelección, pero además hay reelección inmediata. Pero será una decisión que tenga que tomar más adelante», aseguró.
Moreira llegó al Aeropuerto de la Ciudad de México, luego de que las autoridades de España le regresaron su pasaporte al retirarle las medidas cautelares en la investigación que se le sigue en ese país; dijo que está en la disposición de colaborar con lo que pidan la Fiscalía de España y el juez Santiago Pedraz.
Explicó que las autoridades españolas están investigando a otras personas y que es posible que lo llamen para declarar como testigo. «El 2 de marzo podría cerrarse mi caso, pero continúa la investigación hacia otras personas», aclaró.
Reiteró que su defensa demostró que tres de los cuatro delitos que se le imputaban estaban sobreseídos, y que en el cuarto delito, blanqueo de capitales, también fue exonerado.
Narró que el día de su detención, el 15 de enero en el aeropuerto de Barajas, iba acompañado de su esposa y cuando le revisaron su maleta, le informaron que tenía una denuncia en su contra y lo trasladaron a la Audiencia Nacional de España.
Moreira negó que la prisión madrileña de Soto del Real, donde estuvo recluido una semana, sea VIP. «Yo estaba como un interno más; había muchos latinos, musulmanes, mexicanos, españoles. Había por diversos delitos, homicidio, drogas».
«Los días en prisión fueron realmente difíciles y a nadie les deseo eso», dijo. «Fueron momentos muy amargos».
Humberto Moreira dijo que de las imputaciones que se le hicieron en España, relacionarlo con el grupo criminal de ‘Los Zetas’ es la «mayor infamia porque ellos asesinaron a mi hijo».
«El mayor daño que se me hizo es vincularme con quienes mataron a mi hijo, pero en la vida no puedes vivir con rencor».
Advirtió que tomará decisiones de carácter jurídico contra quienes hicieron esos señalamientos.
Agradeció al presidente nacional del PRI, Manlio Fabio Beltrones, por defenderlo y asegurar que demostraría su inocencia. Explicó que su madre y hermanos le prestaron dinero para pagar los honorarios del abogado Manuel Ollé. «Yo ya les pagaré poco a poco».
El ex gobernador de Coahuila dijo que sus empresas Unipolares y espectaculares del Norte y Negocios, asesoría y publicidad seguirán operando, al destacar que son sociedades que pagan impuestos en México.
«Voy a mantener ese negocio», dijo y explicó que entre sus posesiones están 40 chivas y dos sementales.
Dijo que la exoneración que recibió del juez de España es una muestra más de que son falsas todas las acusaciones que han hecho en su contra.
«Si alguien ha sido investigado en este país, si alguien ha sido investigado de todo, he sido yo», dijo, y «les demuestro que todas las acusaciones que hicieron no son ciertas, les demuestro que soy inocente».
Reiteró que su interés es seguir en la política y que seguramente lo hará en su tierra natal.
Humberto Moreira regresó a México luego de que el juez Santiago Pedraz levantó las medidas cautelares que le impuso y decidió dejarlo en libertad por no hallar indicios de delitos de blanqueo u «operaciones relacionadas con organización criminal alguna».
La investigación comenzó en 2013 cuando la justicia estadunidense, que investigaba a Moreira por blanqueo y malversación, pidió a la española varias diligencias, entre ellas la intervención del teléfono del político mexicano, quien se encontraba cursando un máster en Barcelona.