viernes, abril 19, 2024

Malecón del Paseo

Por: Luis Velázquez

•”El chapo” se puso depresivo

•Lee El Quijote para curarse

•Multimillonario y preso

EMBARCADERO: Joaquín Guzmán Loera, “El chapo”, está internado por segunda ocasión en el penal de Almoloya… Y según el reporte, está deprimido… Y, bueno, naturaleza humana al fin, tiene razones de sobra para hundir su ánimo en las tinieblas, y/o lo que el escritor William Styron llamaba “un viaje al abismo”… Primero, quedó con las ganas de un amor contrariado con Kate del Castillo… Segundo, a su pareja, Emma Coronel, le negaron la entrada porque no está casado por la ley civil… Tercero, la SIEDO investiga a su otra pareja, la diputada local de Sinaloa, Lucero Guadalupe Sánchez López, con quien durmiera el fin de año… Cuarto, la película y el libro sobre su vida, que deseaba, quedó frustrada… Cinco, la revista Forbes lo retiró de la lista de los hombres más ricos del mundo, donde todavía figura Carlos Slim… Seis, todos los días lo cambian de celda… Siete, 35 custodios y un perro amaestrado lo cuidan día  y noche… Ocho, en el desayuno, la comida y la cena un perro prueba sus alimentos antes para ver si están envenenados… Nueve, del batallón de abogados que tenía antes ahora los redujeron a cuatro… Diez, vive con la pesadilla diaria de la extradición… Once, ya no pudo cuidar “más que a sus ojos” a la ermoza Kate del Castillo, contra quien la PGR, Procuraduría de Justicia de la nación, se ha lanzado… En tales circunstancias, la máxima autoridad penitenciaria decidió que para ahuyentarle el monstruo de mil cabezas llamado depresión leyera “El Quijote” y se lo regalaron… “El chapo” está leyendo las historias de Miguel Cervantes Saavedra, luchando contra los molinos de viento…

ROMPEOLAS: Se ignora si leyendo “El Quijote” en la cárcel la depresión se cure… El cura del pueblo diría que ene millón de veces leer la Biblia para espantar todos los males de la vida… El geriatra que atiende al tecleador, por ejemplo, necesitó dos años con pastillitas todos los días para desaparecer una onda depresiva canija, y eso, en el ejercicio pleno de la libertad… Pero, bueno, quizá el milagro se posibilite… Por ejemplo, cuando Francisco I. Madero fue encarcelado por Porfirio Díaz Mori, aprovechó el tiempo para escribir sus memorias… Pancho Villa estuvo preso y aprovechó su estancia penitenciaria para aprender a leer y escribir… Dante Delgado Rannauro, ex gobernador de Veracruz, encarcelado en el penal de Pacho Viejo por Patricio Chirinos Calero, fundó en la cárcel su partido político, Convergencia, y escribió sus memorias, cuyo original siempre guardó en su computadora Alfredo Tress, pero un día (ni modo, la vida es así), y luego de que Dante lo ungió diputado local y líder de Convergencia en Veracruz, le descubrió defectos y lo traicionó… Y por tanto, nunca, jamás, se ha conocido el destino de aquel libro… En la cárcel, el escritor ruso, Varlam Shálamov, escribió sus cinco tomos intitulados “Relatos de Kolimá” sobre el sistema penitenciario de José Stalin… La cárcel sirvió a Fiódor M. Dostoyevski para escribir “Memorias de la casa muerta”, su experiencia penitencia cuando fue acusado con ocho jóvenes de sedición… Anton Chejov escribió su libro de crónicas y reportajes intitulado Sajalin, que era otro de los campos de concentración en Rusia… En el penal de Lecumberri, David Alfaro Siqueiros dictó sus memorias al reportero Julio Scherer García, cuando desde Lecumberri también se fugara el capo jarocho, Arturo Herbrad Izquierdo, cuyo feudo en Veracruz estaba en Nautla y que alcanzara su esplendor en el sexenio de Agustín Acosta Lagunes… La experiencia en el penal de las Islas Marías sirvió a José Revueltas, uno de los grandes íconos del movimiento estudiantil del 68, para escribir su novela “Los muros de agua”…

ASTILLEROS: “El chapo” es vigilado día y noche en el penal de Almoloya, porque los carceleros tienen miedo, primero, de que escape por tercera ocasión… Segundo, porque piensan que pudiera suicidarse… Y tercero, porque sienten que otros presos pudieran quitarle la vida… Y en medio de todo, la depresión, que en la edad senecta, sobre todo, cobra víctimas en 8, 9 quizá, de cada diez adultos mayores… Y más, porque como en el caso, la fortuna de Guzmán Loera fue calculada por Forbes en mil millones de dólares, y no obstante, de nada le ha servido… Y cuando estaba a punto de darse el gusto con Kate del Castillo fue reaprehendido… Cierto, cierto, cierto, como para suicidarse… Incluso, porque ni siquiera, vaya, pudo darse la felicidad superior como ocurre con el personaje de “Memorias de mis putas tristes” de Gabriel García Márquez, la historia de un hombre que al cumplir 90 años de edad contrata en una casa de citas a una chica de 20 años y virgen… Y a la hora estelar, el anciano queda dormido y pierde la oportunidad de oro de su vida… Paradojas de la vida, en vez de Kate, “El chapo” se consuela con El Quijote, y lo peor, sin tener a su lado su Sancho Panza, su jefe de seguridad que también fuera detenido en Los Mochis, Sinaloa, y del que nada ha trascendido… Moraleja: desde hoy, los neurólogos han de anotar la lectura de El Quijote como remedio infalible para curar la depresión…

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