México.- Como parte de la Reforma Energética, en 2018 quedará liberado el precio de las gasolinas, y en el periodo de transición en 2016 se pasa de un precio único a un precio máximo de acuerdo con lo aprobado por el Congreso de la Unión, informó en su momento la Secretaría de Hacienda y Crédito Público (SHCP).
Pero mientras los precios de las gasolinas disminuyen, el precio del gas licuado de petróleo (LP) en el Distrito Federal y en algunos municipios de los estados de México e Hidalgo subió 39 centavos este primero de enero respecto del precio que se mantuvo durante 2015.
De acuerdo con los nuevos precios dados a conocer por la Secretaría de Economía y publicados en el Diario Oficial de la Federación, el combustible costará 14.53 pesos, 39 centavos más que 14.14 pesos en que mantuvo hasta el último día de 2015. En el primer mes de 2016 el tanque de 20 kilogramos del gas LP costará 290.60 pesos.
El precio más alto del energético en el país será de 16.56 pesos por kilogramo en algunos municipios de Baja California Sur y Quintana Roo, mientras el menor se pagará en algunas localidades de Tamaulipas, con un costo de 14.34 pesos.
Los precios de las gasolinas y el diésel disminuyeron por primera vez en la historia reciente del país. Así, la gasolina Magna ahora cuesta 13.16 pesos por litro, 41 centavos menos que el precio fijado en 2015, en tanto que la tipo Premium se vende en 13.98 pesos, baja de 40 centavos respecto del mismo periodo, y el diésel tiene un costo de 13.77 pesos, disminución de 43 centavos.
Con respecto a las disminuciones en los precios de las gasolinas y el diésel, la SHCP explicó que cada mes se actualizará la fórmula para la determinación de los precios, con lo cual éstos podrían subir o bajar según las referencias internacionales.
Sin embargo, en general, se prevé que el precio de los combustibles será de un nivel promedio al de inicio de 2016. Pero mes a mes se registrarán variaciones con base en lo que esté pasando con los precios internacionales.
La SHCP afirmó que en los siguientes meses continuarán los ajustes al alza o a la baja en una banda de 3 por ciento, dependiendo el comportamiento de los precios de los combustibles a escala internacional. Este nuevo esquema de precios máximos no tendrá un impacto en las finanzas públicas, aseguró la dependencia.
Es decir, como máximo podría llegar a subir en su momento 3.0 por ciento, si así se mueven las referencias, y podrá llegar a bajar también 3.0 por ciento en caso de disminuciones en los precios internacionales de los combustibles, refirió.
Sobre los precios en la zona fronteriza, señaló que se mantiene el esquema de homologación que ha venido funcionando en ciudades de la frontera norte desde hace más de 20 años, evitando que haya una diferencia sostenida en los precios de combustibles entre México y Estados Unidos.