viernes, mayo 3, 2024

La Rama se niega a morir

Por: Editorial

San Andrés Tuxtla, Ver.

Con la llegada del mes de diciembre, llega a la ciudad de San Andrés Tuxtla, una de sus más arraigadas tradiciones, la cual se adquirió en los primeros contactos con la cultura española. La Rama, es el punto de partida a las celebraciones navideñas, en donde cada diciembre grupos de niños, mujeres y hombres visten las calles de blanco y rojo, acompañándose de panderos, castañuelas y cantos de versos curiosos.

El origen de esta tradición es en la región del Sotavento; se dice que en esa región se dio el encuentro de dos culturas tras el arribo español, y en donde inició la historia de la Nueva España. Los indígenas de esa región celebraban durante las fechas que coincidían con el calendario europeo cristiano, una fiesta de la renovación de la naturaleza, cuyo elemento principal era una rama llamada “versúchil” y que, al coincidir con la celebración europea del adviento y la navidad, fue la ocasión propicia para establecer los primeros vínculos entre las tradiciones indígenas y la religión católica de los misioneros españoles.

Con el paso de los años esta tradición ha ido cambiando, y actualmente La Rama consiste en adornar una rama de árbol con diferentes motivos y materiales como globos, luces, esferas y escarchas.

Por ello personal docente, alumnos y padres de familia del Jardín de Niños “Aurelio Ballados Palacios”, se dieron a la tarea de recorrer las principales calles de San Andrés, con la finalidad de revivir, presenciar y transmitir a los pequeños esta tradición, que poco a poco va quedando en el olvido.

“Naranjas y limas, limas y limones, más linda es la virgen, que todas las flores”, fueron uno de los versos que los pequeños cantaban con emoción; despidiéndose alegres y agradeciendo a las personas que con gusto daban su “aguinaldo”.

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