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Coatzacoalcos, Ver.

Alrededor de las 12:30 horas de ayer, la Cruz Roja recibió una llamada de auxilio para ayudar a una mujer que en apariencia había caído del puente de la Avenida 1 y se encontraba inmóvil sobre la vía pública.

Testigos presenciales dieron a conocer que la joven, que vestía pantalón de mezclilla de color azul marino, blusa de animal print, suéter y tenis negros, momentos antes fue vista caminando por la avenida Juan Osorio con un semblante afligido.

Se incorporó rumbo a la Avenida 1, y a mitad del puente se detuvo, no duró mucho tiempo parada a orillas de la vialidad antes de arrojarse.

Quienes la vieron externaron que esta persona primero estiró una mano sosteniendo su bolso de color rosa para dejarlo caer, vio como el objeto azotó en el suelo luego de haber recorrido los casi 25 metros de altura que la elevaban.

Posteriormente, sin emitir grito alguno, se dejó caer siguiendo la misma trayectoria que su bolso, sin embargo su caída fue frenada por una camioneta que transitaba bajo el puente.

Luego de haber colisionado con la camioneta, el cuerpo de la joven rebotó y terminó tendido a media calle, a un costado de las vías del tren. El conductor de la camioneta se marchó del sitio por temor a ser culpado. Pensó que la había arrollado.

El lugar se vio rodeado por varias personas, después de la Policía Naval y Policía Estatal, quienes resguardaron el área en espera de que la Cruz Roja llegara.

Cuando los paramédicos arribaron, la joven aún contaba con signos vitales y lo más pronto posible fue subida a la ambulancia para su traslado a un hospital.

En el sitio sólo quedó un charco de sangre derramado por la joven suicida, evidente seña de un severo traumatismo de cráneo. Pese a las complicaciones que presentaba, los médicos luchaban por salvarle la vida. La joven permanecía como desconocida, y fue ingresada de urgencias a la clínica 36 del IMSS.

Alrededor de las 16:00 horas se confirmó su deceso, las lesiones que presentaba eran muy graves. Horas después su identidad fue revelada, se trata de la joven Joselyn Promotor Gómez, de 19 años, quien aparentemente tenía problemas familiares y con su pareja sentimental.