- Héctor Yunes se endurece
- Tiro por viaje contra Duarte
- Portes Gil ante Elías Calles
Luis Velázquez
PASAMANOS: El senador Héctor Yunes Landa endurece su discurso contra el gobernador de Veracruz.
Y aun cuando parte del CDE del PRI se empeña, de manera innecesaria, en decir que en ningún momento hay ruptura sino, por el contrario, choque de opiniones, en el terreno práctico el mundo político sabe que sin el visto bueno del señor Javier Duarte, la sucesión se complica para un aspirante y suspirante.
Tal cual, y luego de la luna de miel tan intensa que ambos vivieron, la película “La caña amarga de pescar” fue tsunámica y nada indica, ni siquiera, vaya, con el cabildeo de Manlio Fabio Beltrones, presidente del CEN del PRI, que pudiera darse la reconciliación.
Temperamentales tanto Héctor como Duarte, relaciones intensas y peligrosas, el par es radical y explosivo, y por tanto, suelen querer sin trabas, pero al mismo tiempo, guardar rencor y odiar sin límites.
El último rafagueo del senador fue apocalíptico para la política económica del duartismo que arrasa por completo con lo que resta del secretario de Desarrollo Económico, Érik Porres Blesa, un tipo incapaz de mirar a los pobres y jodidos, y menos de entender y comprender la circunstancia social.
Y más porque el fino y exquisito titular de la SEDECO alardea de la creación de empleos y de la inversión nacional y extranjera, como el caso, digamos, del proyecto Etileno Siglo XXI, de la empresa brasileña, Odebrecht, en Nanchital, que por ahora ha despedido a unos ocho mil trabajadores, cuyo destino se hundió en el vacío.
BALAUSTRADAS: En la lógica del senador Yunes Landa existen cositas concretas y específicas como las siguientes:
Una. En Veracruz hay, de plano, recesión.
Y la recesión, por ejemplo, descarriló a Estados Unidos en el siglo pasado.
Dos. De los años 2013 al 2014, Veracruz creció solo en un 0.5%, de tal forma que ahora en el primer semestre del año 2015 se perdieron 18 mil 155 fuentes de empleo, con el daño consiguiente en la vida cotidiana de las familias en un Veracruz disputado por el Cartel Jalisco Nueva Generación, del Golfo y los Zetas según la PGR y la DEA, la agencia antinarcóticos de Estados Unidos.
Tres. Seis de cada diez habitantes de Veracruz en edad productiva viven del comercio informal, que significa un changarrito en la vía pública y ambulantaje.
Cuatro. En Veracruz hay millonarios recursos desviados de los que el gobierno de Veracruz rehúye la transparencia y la rendición de cuentas.
Como el caso, por ejemplo, de los 90 millones de pesos que recaudaron los hoteleros por el impuesto al hospedaje y cuyo destino nadie conoce.
Peor tantito: por más que las cámaras empresariales han exigido cuentas la única respuesta ha sido el silencio.
Por eso, documenta Yunes Landa, él mismo se opuso a que el duartismo aumentara el impuesto a la nómina del 2 al 3 por ciento porque significa despido automático de empleos, recorte salarial y la contracción de la inversión privada.
Yunes Landa, pues, ha vuelto a sacar la casta, poniendo el índice en la llaga, apegado a hechos, y si en el año 2010 fue disciplinado y terminó aceptando la presidencia del CDE del PRI y luego la senaduría, la población electoral ya lo ha medido, y por tanto, más vale su congruencia.
Y es que por ningún lado se justificaría que, de pronto, apareciera por ahí otra vez del brazo del señor Duarte, pronunciando la homilía ante 30 mil evangélicos en el estadio Luis “Pirata” de la Fuente y al lado del Jefe Máximo del Priismo en una comelitona con los diputados federales electos del PRI, pues, entonces, en el pecado llevaría la penitencia.
Y el juicio del pueblo sería inapelable… en su contra.
ESCALERAS: La estadística económica expuesta por el senador Héctor Yunes marca la agenda pública, pues días anteriores, las cámaras empresariales publicaron un desplegado oponiéndose al incremento del Impuesto a la Nómina.
Y, bueno, tanto Héctor como Duarte son priistas, y uno es senador y el otro gobernador, y el primero aspira a la silla y el segundo está por irse, y se trata de vasos comunicantes donde resulta indicativo y significativo el manifiesto choque de trenes.
Recuerda, por ejemplo, cuando Plutarco Elías Calles impuso de presidente de la república a Emilio Portes Gil, y a los quince días tuvieron el primer raspón por la política agraria y el presidente le renunció al tlatoani, pero fue convencido de seguir porque así convenía a los supremos intereses nacionales…como les llamaban.
Semanas después, Portes Gil se dio la arrepentida de su vida cuando Elías Calles le impuso al gabinete legal y ampliado y lo cercó, además de que él mismo se ungiera secretario de Guerra, teniendo en formación al partido abuelito del PRI, el PNR.
Es decir, una relación conflictiva entre el senador y el gobernador que igual que Portes Gil con Elías Calles las aguas políticas solo tomaron su nivel cuando el presidente tocó los tambores de guerra y “El turco” se disciplinó ante el liderazgo y la fuerza campesina de Portes Gil, que lo respaldó.
Y es que si Duarte humilló a Héctor con la caña de pescar, ahora Héctor le está devolviendo golpe por golpe, y la tempestad que mira venirse se antoja de estragos imprevisibles, a menos que Yunes Landa se imponga, como Portes Gil, con la fuerza social que habrá cultivado en tantos meses y años de recorrido en el territorio jarocho con hordas y tribus dispuestas a jugarse el todo por el todo.
Ahora es cuando ha de mostrarse el puño como Portes Gil a Elías Calles y eso que era el Jefe Máximo.