miércoles, mayo 14, 2025

Malecón del Paseo

  • Poema de Duarte a la UV
  • Evade puntos en desplegado
  • Nada sobre deuda millonaria

Luis Velázquez

EMBARCADERO: En el semanario Proceso número 2030 fue publicado un desplegado de tres cuartas de plana de la Junta de Gobierno de la Universidad Veracruzana al duartismo.

Nueve académicos solicitaron al Jefe Máximo del Priismo el pago de los dos mil millones de pesos, “400 correspondientes a subsidios federales recibidos por el Gobierno del Estado; pero no transferidos a la Universidad”.

Es decir, 1,600 millones de pesos que desde hace varios meses la secretaría de Finanzas y Planeación ha dejado de entregar a la máxima casa de estudios.

Tal cual significó el eje central del desplegado, además de un calendario de pagos de las transferencias requeridas.

48 horas después, respuesta demasiado tardía quizá por el caso de la película “Caña de pescar”, filmada el domingo en el WTC, el gobierno de Veracruz contestó a la Junta de Gobierno, y de paso a la rectora, doctora Sara Ladrón de Guevara, con copia a la comunidad académica.

El desplegado constituye un hermoso poema en prosa, donde, entre otros aspectos, se jura lealtad eterna, lealtad perruna, lealtad chihuahueña, a la UV.

También, de paso, anotan que nunca, jamás, en su vida, el duartismo “ha regateado recurso alguno para la educación en todos sus niveles”, quizá en gratitud a que cuando Érick Lagos y Javier Duarte eran estudiantes, Víctor Arredondo Álvarez rector, Édgar Spinoso Carrera, uno de los secretarios del rector con Mauricio Rullán, QEPD, otorgaron unas becas al par de condiscípulos en la Escuela de la Fidelidad, de la que fueron y son compañeros de pupitres.

En el desplegado también se cortan las venas por la UV, exponiendo que más allá de la caída del precio internacional del petróleo y el replanteo del gasto público, el duartismo otorga el más ambicioso subsidio a la UV, “lo que le ha permitido un crecimiento sin precedente en la historia reciente”, dejando fuera, por ejemplo, y entre otras cositas, a 22 mil jóvenes cada año en tiempo de inscripción.

El poema/desplegado tal cual, bien pudo haberse intitulado:

“No todo es dinero… en la vida”.

ROMPEOLAS: Luego del kilométrico poema en prosa, en ningún momento el gobierno de Veracruz contesta ni especifica a la Junta de Gobierno el pago de los dos mil millones de pesos, de los cuales 400 millones son de participaciones federales directitas, y que los diputados federales, Érick Lagos (PRI), Cuitláhuac García (MORENA) y Miguel Ángel Yunes Linares (PAN) se comprometieron a cabildear para su entrega, luego de un cafecito con la rectora.

Tampoco el poema kilométrico determina a la Junta de Gobierno un calendario de pagos de los recursos que por ahora permanecen en el limbo, el estadio medio entre el infierno y el cielo según el relato bíblico.

Es decir, un desplegado de una plana completita en la prensa frente a un desplegado de tres cuartas de plana en Proceso para evadir la respuesta al pedimento básico.

Tal cual, el gobierno de Veracruz hablando con la Virgen.

En primera instancia se diría que el peor sordo del mundo es aquel sin voluntad para oír ni escuchar.

La rectora de la UV ya lo dijo, sin rodeos ni medias tintas.

“No me tiembla la mano ni se me quiebra la voz” para defender a la UV.

Soy capaz, insistió, de una revolución silenciosa.

Pero de igual manera tiene fama de académica bragada y peleadora callejera.

Tenaz y persistente.

ASTILLEROS: Así fue, por ejemplo, cuando recién las elecciones en unas tres, cuatro facultades de la UV, donde luego de la terna un grupito de maestros se lanzaron en su contra, y hacia el final del día se mantuvo en que si existía una terna, de ella emanaría el nuevo director.

Ella también llegó, por ejemplo, a la dirección del Museo de Antropología en una terna, donde se impuso.

En la facultad de Antropología, por ejemplo, se enfrentó a una corriente antropológica y la derrotó en buena lid.

Su esposo, un político que trabajara con Manuel Bartlett Díaz secretario de Gobernación, fue creador en el chirinismo con Enrique Ampudia Mello de aquel famoso “Palomar” donde llevaban el pulso social de norte a sur y de este a oeste de Veracruz.

De 46 años de edad, madre de un hijo único que toca violoncello, Sara Ladrón es, como dicen en la Cuenca del Papaloapan, “una mujer a la que el arroz se arrebata” cuando se trata de defender a la UV, donde ha consagrado su vida.

Y más si se considera que la respuesta del gobierno de Veracruz a la Junta de Gobierno fue, simple y llanamente, evasiva.

Atole con el dedo dirían en todos los puertos del mundo.

Es decir, que con todo y la perorata del poema kilométrico del desplegado una vez más el duartismo la está menospreciando, mirando y percibiendo con indolencia.

Cuidado, Veracruz está convertido en un polvorín social, por tanta pobreza y miseria con un millón y medio de habitantes que según el CONEVAL sólo aplican una o dos comidas al día, y mal comidas.

Publicidad




Otras noticias

Bitácora Política

Bitácora Política

Bitácora Política

Bitácora Política