Un video difundido en redes sociales encendió la polémica al mostrar lo que parece ser un concierto dentro del Centro de Readaptación Social (Cereso) 1 de Hermosillo, presuntamente protagonizado por el cantante de corridos tumbados, Natanael Cano. La grabación, de menos de un minuto de duración, muestra a varias personas reunidas mientras se escucha de fondo la canción El Despapaye.
La Secretaría de Seguridad de Sonora confirmó el 15 de septiembre la apertura de una investigación para verificar la autenticidad del material. En caso de que se compruebe que las imágenes son reales, se aplicarán sanciones conforme a la ley.
¿Hay funcionarios implicados?
La dependencia informó que el coordinador del Sistema Estatal Penitenciario, quien estaba en funciones al momento en que habría ocurrido el evento, ya no forma parte de la institución. La salida del funcionario se da en medio de los cuestionamientos sobre cómo habría sido posible el acceso de un artista de talla internacional a un penal de alta seguridad.
El titular de la Fiscalía General de Justicia del Estado (FGJES), Gustavo Rómulo Salas Chávez, declaró que se interpondrán denuncias formales y se buscará aplicar sanciones penales, además de las medidas disciplinarias correspondientes dentro del sistema penitenciario.
¿Un concierto privado para “El Terry”?
Diversos reportes de prensa señalan que la supuesta actuación de Natanael Cano habría sido organizada para un interno en particular: Francisco Alejandro “N”, apodado El Terry. Este sujeto fue detenido en marzo de 2024 acusado de abuso sexual contra una mujer en un hotel de Hermosillo.
El Terry no solo enfrenta cargos penales, también es conocido por su vínculo con la escena de los corridos tumbados. Es compositor de canciones como Pacas de Billetes y Ghini, interpretadas por Natanael Cano, y mantiene cercanía con otros exponentes del género, como Gabito Ballesteros.
Investigación en curso
Hasta el momento, las autoridades mantienen bajo análisis la autenticidad del video, que según informes preliminares habría sido grabado en enero pasado. La Secretaría de Seguridad de Sonora recalcó que, de confirmarse, se actuará “conforme a la ley y sin excepciones”.
El caso genera múltiples interrogantes: ¿se trató de un montaje, de una grabación fuera del penal o efectivamente de un concierto clandestino en un Cereso?