MTT 420RR

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Seguro que a muchos os sonará la MTT Y2K, la única moto que se puede comprar con un motor de turbina sin tener que recurrir a engendros extraños y que, además está homologada para circular por carretera en EEUU. Es además la protagonista de la persecución final en la película de Torque, rodando al límite.

Por supuesto, Jay Leno cuenta con una en su garaje y tiene una curiosa anécdota con ella cuando utilizándola para ir al plató de televisión y parado en el semáforo, el vehículo que estaba detrás se acercó más de la cuenta para ver la MTT Y2K y, con cara de estupefacción, Leno pudo ver como se empezaba a derretir la defensa del coche debido a los gases de escape que emanaban de la turbina.

Pues ahora la gente de MTT ha ido un paso más allá para presentar la MTT 420RR. y la “RR” viene del acrónimo Race Ready y gracias a su turbina Rolls Royce Allison – 250 – C20 de gas es capaz de producir la increíble cifra de 420 cv girando a 52.000 revoluciones. Y si la potencia te parece brutal, no hablemos ya del par motor el cual es de 678 Nm a solamente 2.000 revoluciones.

¿Con qué combustible la MTT 420RR? Pues con una mezcla de diésel y keroseno, que están a buen recaudo en su depósito de 34 litros. La caja de cambios es automática con dos relaciones, el chasis de aluminio y el peso total, lejos de lo que podríamos pensar, se queda en unos ligeros 227 kg. La velocidad máxima es desconocida por el momento, pero se calcula que podría rondar los 440 km/h.

Comparado con la MTT Y2K, la potencia ha aumentado en 100 cv y la velocidad, en unos teóricos 75 km/h más (la anterior ostentaba el récord de la moto más rápida de producción con 365 km/h). Para intentar tener todo controlado, MTT ha trabajado estrechamente con Öhlins para el diseño de las suspensiones así como con GPR para el amortiguador de dirección. Las llantas son unas Dymag de fibra de carbono y montan neumáticos en 17” de dimensiones 120/60 y 200/50.

Como curiosidad, la Y2K se enfrentó hace años contra un Bugatti Veyron, uno de los máximos exponentes en cuanto a prestaciones, y sin embargo, fue literalmente humillado por la moto ya que tras 5.4 segundos y cuando el Veyron superaba los 180 km/h, la MTT ya volaba a más de 320 km/h. La locura.